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Entrevista

Anaïs Menguzzato: "Yo he venido aquí a transformar el modelo de convivencia, no a multar"

La concejala de Protección Ciudadana cree que el botellón o la prostitución deben abordarse de forma integral

Anaïs Menguzzato en la sala de control de la Policía Local de Valencia. fernando bustamante

Llega usted a un puesto completamente nuevo y muy operativo. ¿Le da vértigo?

Es cierto que yo estaba en la administración autonómica y en un puesto muy chulo. Ser directora general del Instituto de las Mujeres me gustó mucho, pero es verdad que fui en esa lista porque lo que de verdad me gusta es la política municipal.

Fue todo muy rápido y sorpresivo. La salida de Joan Calabuig lo precipitó todo.

Es verdad que los cambios en el Consell se hicieron por sorpresa. Pero aunque fue una cosa rápida, en el fondo lo deseaba.

En la anterior legislatura usted estaba en la oposición y ahora vuelve para gobernar.

Sin duda, esto es un reto, pero como vengo del mundo del Bienestar Social (yo soy trabajadora social) y precisamente creo que lo que le falta a la policía es trabajar la proximidad, la mediación y la convivencia, creo que tengo bastantes cosas que aportar.

¿Y cómo se siente en este modelo de gobierno a tres bandas?

Bueno, no ha cambiado demasiado. Yo estaba en una conselleria con una fórmula de mestizaje parecida a esta. Mi consellera era Mónica Oltra y fue fácil. Tenemos muchos espacios en común. Y el viernes, cuando estuvimos en el Saler, me sentí muy a gusto en el debate de trabajo, con muchas confluencias, cómoda, bien, sin ningún problema.

¿Le preocuparon las turbulencias que hubo en este traspaso de poderes?

No, porque entiendo que en el modelo de ciudad de cada uno es inevitable que haya alguna discrepancia. Pero lo bueno de todo esto no es discrepar, sino encontrar una solución en la que todos nos sintamos satisfechos, que es lo que ha ocurrido.

¿Ha podido ya ponerse al día del trabajo en la Policía Local y los Bomberos?

Yo tengo la suerte de haber estado la anterior legislatura aquí y tengo algo de memoria de lo que pasaba. Y bueno, lo que ya se ve desde que Sandra llegó aquí es que ha vuelto la iniciativa política a este ayuntamiento y especialmente a esta concejalía. Sandra fue capaz de abordar con valentía temas que el PP llevaba años eludiendo.

¿Alguna de esas líneas?

Una en concreto: la proximidad. Aquí lo importante es que los valencianos sepan que la policía es su mejor aliada. Otra cuestión que se abordó enseguida: hay que cuidar a los más de 2.000 funcionarios de esta delegación. Es fundamental que trabajen seguros. En este año se han renovado los equipos de los bomberos y vamos a renovar en breve los de la policía. Hay que trabajar en esto porque fue una cosa olvidadísima del PP. Y además, y esto es una cosa que vamos a hacer el año que viene, tienen que ser suficientes en número para que nos puedan cuidar, porque hace 10 años que no se convoca una oferta de empleo público para Policía Local.

¿Cuánta gente falta?

Ahora hay 1.600 policías y 400 bomberos. Y la oferta que sacamos para 2016 es de 33 policías. Es insuficiente. Yo creo que tenemos que hacer una apuesta por mejorar. Lo tendremos que hacer gradualmente porque hay una cosa que se llama presupuesto, pero esos 33 sirven para cubrir aquello que no se ha estado cubriendo todos estos años.

Ésta es una concejalía muy mediática y el botellón está en la calle ¿Cómo se puede afrontar un problema así?

Vamos a ver. Valencia es una ciudad segura, pero tiene problemas recurrentes de convivencia por falta de civismo. Ese es el problema principal que tiene nuestra ciudad. ¿Que pasa? que ahora, con el modelo antiguo, la policía era el último recurso siempre. Cuando todo fallaba, venía la policía. Para mi el primer objetivo es que Valencia sea un modelo de convivencia. Ese sería el cambio radical para mi. Y en segundo lugar que los problemas se aborden de manera integral. Enviar a la policía no soluciona los problemas.

Le hablaba en concreto del botellón.

Lo mismo. Afrontar el botellón no es precisamente poner más policías. Además, nosotros hemos venido a transformar, no a multar. Y esto es el cambio de modelo. En el caso del botellón la realidad es que la policía acude cuando los vecinos ya están hartos, así que este problema lo vamos a enfocar desde cuatro ejes. Uno es el de la salud pública. No podemos admitir que los jóvenes de 13 ó 14 años se emborrachen todos los fines de semana. Y luego está el descanso de los vecinos, la limpieza y el impacto en la hostelería. Yo me dispongo a que la policía esté al servicio de todo lo que haga falta, pero no podemos trasladar el problema a la policía. Esto es lo que se ha hecho siempre y yo llevo 20 años oyendo hablar de esto sin que nada cambie.

Ha citado la hostelería. Aquí hay un problema de ruido, diferencia de horarios etc. ¿Es posible resolver esto?

Ya en el Saler hemos hablado de la necesidad de combatir en otros frentes los problemas de ruido. Están las terrazas y ahora los apartamentos turísticos. Se suman muchas realidades que llevan años sin resolverse y que vamos a abordar de manera transversal. La policía está para garantizar el derecho de la mayoría, pero si somos un elemento en el proyecto de ciudad, no como último recurso, porque no creo en ese modelo y porque no tenemos gente para todo. Uno de los primeros retos que me marco es hacer por fin una ordenanza de convivencia y civismo que no existe. Y tenemos que usar la mediación como la mejor solución a nuestros problemas cotidianos.

Tema prostitución. Está muy abandonado esto ¿Tiene previsto seguir aplicando la ordenanza que usted ayudó a implantar? Primero se multó mucho, pero luego dejó de hacerse y todo sigue igual.

De verdad creo que cualquier problema, y este es muy grave, tenemos que abordarlo de forma integral. Y el problema de convivencia que genera la prostitución no se abordaba de forma integral. Yo misma propuse un plan social para adjuntarlo. La solución a los problemas de las mujeres no van a venir de una ordenanza, eso lo tenemos claro. Ahora bien, si hubiera un gobierno que se creyera esto de verdad, tendría que trabajar en la lucha contra la trata. Casi el 90% de las mujeres que se prostituyen son víctimas de la trata. Y eso obliga a las fuerzas de seguridad a perseguir a los proxenetas, cosa que se hace poco.

¿Y aquello de multar a los clientes? ¿Eso está olvidado?, ¿seguirá?

Nuestra intención es transformar y no multar. Quiero transformas la realidad social de esas mujeres y la realidad de convivencia que tienen los vecinos. Nuestro objeto no es multar a nadie. Eso no resuelve los problemas.

Sus primeras declaraciones fueron para destacar la lucha contra la violencia de género. ¿Que se puede hacer desde la Policía Local?

Vamos a hacer el grupo Gama para que sea un grupo exclusivo para mujeres víctimas de violencia de género. Esto es fundamental, porque la realidad es que la policía local protege a 600 mujeres. Lo que no entiendo es que no se hubiese hecho ya.

En ningún momento me habla de planes de choque, sino de líneas maestras y transformación, pero a la legislatura le quedan tres años. ¿Se puede avanzar en este tiempo?

Yo estoy segura de que sí. Por ejemplo, el tema de la grúa. El modelo agresivo que parecía que iba a recaudar lo podemos cambiar y ponerlo al servicio de la movilidad. Ese cambio de dejar de multar se puede incluir ya en el nuevo pliego de la grúa, que licitaremos de forma distinta.

Puede ser una legislatura muy potente.

Eso espero. A mí me gustaría que al final de este tiempo en Valencia se pueda vivir mejor.

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