El Ayuntamiento de València contará por primera vez con un primer Plan Director de Seguridad Vial, un documento que nunca se había elaborado a pesar de que desde 2011 los accidentes de tráfico en la ciudad se han disparado, pasando de 137 siniestros cada 10.000 vehículos, a los 166 de 2015, último dato registrado en el anuario estadístico de la ciudad. En el último mandato de Rita Barberá se produjo este notable incremento, mientras que el año que entró a gobernar el tripartito actual registró un tímido descenso.
El Plan Director de Seguridad Vial estará listo en octubre y será elaborado por la ingeniería CPS, a la que se ha adjudicado el contrato de redacción por un importe total de 18.775 euros. Seis empresas presentaron sus propuestas a la concejalía de Movilidad Sostenible.
CPS Ingenieros presentó ayer en la tercera convocatoria de la comisión sectorial de la Mesa de Movilidad sobre seguridad vial el programa que llevará a cabo para elaborar el documento final. Por primera vez asistió la concejala de Seguridad Ciudadana, Anaïs Menguzzato, aunque declinó participar en el debate.
Precisamente, serán las entidades y colectivos que forman parte de la Mesa de la Movilidad (más de 60) los que realizarán el diagnóstico de la seguridad vial de la ciudad a través de una encuesta que se les remitirá en breve. Serán quienes señalen las causas que, a su juicio, provocan los accidentes. Una vez analizados los objetivos que se pretende alcanzar, la valoración de los diferentes actores y las conclusiones de un taller participativo, CPS realizará una evaluación final, y también propondrá medidas concretas para reducir la siniestralidad en el «cap i casal».
Los distintos colectivos de la Mesa de la Movilidad pidieron, entre otras cuestiones, que el Ayuntamiento de València comience a extender la velocidad máxima de 30 km/h como medida para reducir los accidentes y varias voces sugirieron dar voz a la ciudadanía a través de un plan de participación más amplio. El coordinador de la Mesa de la Movilidad, Joan Olmos, pidió que se detallen «todos y cada uno de los problemas» que las entidades detecten en la ciudad.
