Desde 2005, los Clubes de Lectura se han convertido en una de las actividades principales de las Bibliotecas Municipales de València. Fue entonces cuando la Biblioteca de la Petxina acogió el primer encuentro de lectores para compartir impresiones respecto a una determinada obra, y desde ese momento la iniciativa se ha ampliado hasta los 23 clubes propios y otros tres externos.

Pero los clubes de lectura de las bibliotecas municipales no se limitan únicamente a leer y comentar una obra, sino que desde hace algún tiempo completan su oferta con diferentes actividades que enriquecen considerablemente la experiencia de sus participantes.

Uno de los más recurrentes son los encuentros con los autores. Gracias a ellos, escritores como Rafael Chirbes, Carmen Posadas, Carmen Amoraga, Vicente Muñoz Puelles o Santiago Álvarez han tenido ocasión de intercambiar impresiones con los lectores.

Otra de las propuestas con mayor aceptación son las rutas y los viajes que se organizan a partir de un autor o de una obra literaria; sin ir más lejos, en los últimos tiempos se han realizado recorridos por Orihuela como homenaje a Miguel Hernández, catas de vinos inspiradas en el libro de Noah Gordon 'La bodega', rutas por la Salamanca de Miguel de Unamuno y el Madrid de Pérez Galdós, paseos por l'Albufera retratada por Blasco Ibáñez o degustaciones de comida japonesa en honor a Hiromi Kawakami.

Las novedades

Como novedad de este año, en las bibliotecas municipales de València se ha puesto en marcha un club de lectura en valenciano y dos club-taller de poesía también en valenciano. E, y está previsto que en 2018 se pongan en marcha varios clubs infantiles y juveniles con el apoyo de la Subdirección General del Libro.

Los 23 clubes de lectura se distribuyen entre las bibliotecas de Exposición,, Biblioteca del Mar, Tosca, Nova Al Russafi, Azorín, Joanot Martorell, María Moliner, Petxina, Timoneda, Francesc Almela, Roís de Corella e Isabel de Villena. Eduard Escalante cuenta con un club en valenciano y Clara Santiró y María Beneyto con talleres literarios de poesía en colaboración con el Gabinet de Normalitzacció Lingüística.

Los clubes de lectura funcionan a través de grupos de entre 10 y 20 personas, con un tramo de edad que oscila entre los 30 y los 65 años. Suelen reunirse una vez al mes, y la alta demanda de participación ha provocado que, en este momento, todos los clubs tengan lista de espera y algunos incluso hayan tenido que desdoblar su actividad.

Las lecturas son seleccionadas por los coordinadores, bibliotecarios y los propios miembros del club, siendo la ficción el género con mayor número de peticiones por delante de la poesía, el teatro y el cómic. Gracias al fondo de las bibliotecas, no resulta complicado encontrar 20 ejemplares de una misma obra, si bien en ocasiones es necesario solicitar adquisiciones porque falta algún ejemplar para completar el lote o porque es necesario comprar nuevos títulos.

Entre los últimos autores analizados se encuentran nombres tan variados como Tom Sharpe, J. D. Salinger, Camilo José Cela, Ray Bradbury, Rosa Montero, Paul Auster, Joseph Conrad, Vicent Andrés Estellés, Pierre Lemaitre, Kapuscinski, Siri Hustvedt, María Oruña o Víctor del Árbol.

Desde el colectivo se considera la iniciativa como "una actividad de fomento de la lectura que, además, contribuye a favorecer un cambio en la percepción social de las actuales bibliotecas, como espacios vivos y dinámicos. Igualmente, son bancos de capital social que facilitan las relaciones entre sus participantes, favorecen el debate y la tertulia y el desarrollo de la capacidad de lectura crítica".

En la actualidad se distinguen dos tipos de clubes: los que surgen por iniciativa del personal técnico de las bibliotecas, y los que responden a peticiones de usuarios y asociaciones a los que se facilita las lecturas de forma periódica (clubes externos).