¿Puede un único vino mantener el tipo ante un menú compuesto por algunos de los clásicos del chef Quique Dacosta? Tras la presentación en sociedad del nuevo tinto de Bobal de Dominio de la Vega (Finca La Beata) en el restaurante El Poblet (6º puesto en la guía de los 55 mejores restaurantes de la Comunitat Valenciana), queda claro que sí.

Y es que la bodega con sede en Requena ha querido vincular su obra cumbre (un tinto de Bobal de cepas centenarias localizadas en el paraje que le da nombre) a la cocina del tri-estrellado chef con una peculiar presentación en la que el vino se midió a algunos de los platos que han marcado la trayectoria de Dacosta (piedra de parmesano, la gallina de los huevos de oro o arroz cenizas entre otros). El resultado fue más que favorable para el vino, un tinto de elegante acidez pese a su larga crianza, viva frutalidad, buen equilibrio, contundente estructura y contenida complejidad.

Finca La Beata culmina un proyecto del enólogo Daniel Expósito basado en el concepto de vinos de finca y la variedad de uva Bobal, autóctona de la DOP Utiel-Requena. Se trata de un vino que refleja las particularidades del paraje donde se cultivan sus uvas. Es un tinto de aspecto profundo, con aromas que recuerdan la fruta roja muy madura y el monte mediterráneo y un tacto en boca intenso, sedoso y lleno de matices.

La presentación de Finca La Beata resultó una velada de claros tintes literarios, evocando los clubes de lectura neoyorquinos, donde el vino fue portador de infinitas narraciones. Quique Dacosta no quiso faltar dando la bienvenida a los asistentes, y el polifacético Tonino Guitián actuó como maestro de ceremonias, propiciando interesantes temas de conversación en torno al vino. La artista Raquel Rodrigo „un referente del street-art„ asumió a su vez el reto de reinterpretar la etiqueta de Finca La Beata en su obra, bordada en seda.