ETA entra en la campaña política vasca

Patricio Simó

Patricio Simó

El tema de ETA había sido soslayado durante toda la campaña electoral vasca, a diferencia de lo que ha ocurrido en otras elecciones autonómicas donde ETA ha marcado la agenda política de algunas formaciones, aunque ETA, afortunadamente, haya desaparecido.

En el debate organizado por la televisión pública apenas hubo referencias a ETA, salvo cuando el candidato del PSE Eneko Andueza interpeló a la representante de Bildu Nerea Kortajanera para que condenara el terrorismo etarra. Obvia decir que no lo hizo.

Como tampoco lo hizo el candidato de EH Bildu Pello Oxtandiano durante una entrevista en la cadena Ser cuando el periodista le preguntó sobre si ETA era una organización terrorista. Oxtandiano calificó a ETA de organización armada. Horas después ha pedido perdón a las víctimas. Unas disculpas que llegan un poco tarde.

El candidato de EH Bildu tiene que contentar a las diferentes corrientes ideológicas que integran la izquierda abertzale entre ellas Sortu y a su mentor, Arnaldo Otegui.

Dentro de EH Bildu que es una coalición de partidos está Sortu, dirigida por Arnaldo Otegui que sigue negándose a condenar el terrorismo etarra. Otras como Aralar o Eusko Alkartasuna del ex lehendakari Carlos Garaicoetxea, sí que lo han hecho y siempre han condenado el terrorismo.

ETA fue una organización terrorista que acabó con la vida de cerca de un millar de personas, simplemente por el hecho de pensar diferente. Sus miembros no fueron activistas sino terroristas. No hubo lucha armada sino terrorismo salvaje. Tampoco sus miembros son presos políticos sino terroristas. La terminología en este caso es muy importante y hay que llamar a las cosas por su nombre.

Mientras EH Bildu no pida perdón a las víctimas y reconozca el daño causado, tras casi 45 años de asesinatos indiscriminados y donde muchas personas tuvieron que abandonar el País Vasco porque estaban amenazadas de muerte, su presencia en la vida política vasca y española no estará normalizada.