El día 8 de agosto la Cooperativa La Viña abrió sus puertas para las primeras variedades blancas. La vendimia se ha adelantado un par de semanas respecto a otros años debido a la ola de calor.

Algo que se ha repetido en otras DO como Rioja, Ribera del Duero o Castilla La Mancha.

La uva está sana, pero, en general, se prevén menos kilos.

Si continúa la ola de calor es muy probable que durante las primeras semanas de septiembre se comiencen a vendimiar las variedades tintas.

El calor ha impedido el normal desarrollo de los racimos. Las bayas se han quedado pequeñas. Es de esperar que está baja producción vaya acompañada de unos buenos precios en la uva.

La DO de Rueda ha elaborado a través de Asaja de Castilla y León un interesante estudio de costes de producción de uva donde concluye que el coste de producción se sitúa en 0,47 euros en secano y de 0,51 en regadío. A la uva en cultivo ecológico dado la mayor aplicación de productos sanitarios y a que estos son también más caros que los convencionales se ha valorado un incremento del  coste del 11%, tanto en secano como en regadío.

Todos deberíamos contar con un estudio de estas características para saber si nuestra explotación es rentable o no y si el precio que percibe el agricultor llega a cubrir los costes de producción o si por el contrario estamos perdiendo dinero.

El estrés hídrico se está notando no solo en las cepas sino también en almendros y olivos. La falta de precipitaciones desde el pasado mes de mayo está haciendo que tanto la planta como los racimos se resientan.

Una situación generalizada en el resto del territorio nacional con los embalses por debajo del 40% y con una ola de calor que no se conocía, con un mes de julio y agosto con temperaturas anormalmente altas.