Confiar tu formación como piloto de transporte de líneas aéreas a la Organización de Entrenamiento de Pilotos (ATO, por sus siglas en inglés), aprobada por la Agencia Europea de Seguridad Aérea Airpull Aviation Academy, es apostar a caballo ganador. Tanto es así, que recientemente la ATO ha sido galardonada como Mejor Escuela de Pilotos Europea del pasado año 2019.

Airpull Aviation Academy, escuela de capital completamente valenciano, comenzó su andadura allá por el año 2004, dedicándose a la formación de pilotos privados con una media de 200 horas de vuelo al año. A partir de 2011 comenzó a forjarse un ambicioso proyecto iniciado con la adquisición en propiedad del Aeródromo de Requena -con código de la Organización Civil de Aviación Civil LERE-, situado en el interior de la provincia de València y que es, actualmente, su base de operaciones.

Dicha compra supuso el pistoletazo de salida al crecimiento exponencial que la organización ha llevado a cabo. Tras la consolidación del Aeródromo de Requena como uno de los aeródromo con más operaciones del estado entre los años 2011 y 2014, Airpull Aviation Academy decidió solicitar su aprobación como Organización de Formación de Pilotos de Transporte de Líneas Aéreas, aprobación que recibió en marzo de 2015 y que la convirtió en la primera y única ATO compleja valenciana. Puesto que ocupa en la actualidad y que conjuga, además, con el de ser la ATO con mayor número de operaciones y horas de vuelo de toda la Comunitat Valenciana.

Proyecto consolidado

Airpull Aviation Academy, tras su aprobación como centro de formación de Pilotos de Transporte de Línea Aérea, ha pasado en tan sólo cinco años de volar 400 horas a volar más de 6000 en el año 2019. De realizar 300 operaciones a más de 3500 en 2019. De tener tres aviones a disponer de una flota de diez aeronaves y dos simuladores. De tener 12 alumnos a más de 150 en la actualidad.

Estos pasos descritos y logros realizados no hubieran sido posibles sin un proyecto consolidado desde sus inicios, bien estudiado con anterioridad y pilotado por excelentes profesionales tanto del mundo de la formación aeronáutica como de la gestión de centros de formación de pilotos. La solvencia económica de la empresa Airpull Aviation SL, única en España, les lleva a poseer y gestionar dos aeródromos (Requena y Soria-Garray), una escuela de pilotos profesionales, una escuela de vuelo sin motor y una empresa de trabajos aéreos de fotografía, publicidad aérea y paracaidismo, así como seguridad necesaria para que el alumno piloto sólo tenga que preocuparse de estudiar.

Pero no todo es una empresa solvente, Airpull Aviation Academy cuenta con el equipo de instructores de vuelo más experimentado de todo el estado español, contando entre sus 12 instructores con cuatro examinadores de vuelo autorizados por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea. Cuenta además con un reputado plantel de instructores de conocimientos teóricos formado por psicólogos, abogados especialistas aeronáuticos, directores de operaciones de diferentes compañías aéreas, controladores de tráfico aéreo…

En resumen, sólo Airpull Aviation Academy supone para el alumno piloto la solvencia del líder europeo en formación aeronáutica. Actualmente, realiza dos promociones de su Curso Integrado ATPL(A) al año, siendo el 28 de septiembre la fecha de comienzo de la segunda de este año 2020.

Homenaje a las víctimas del coronavirus

El Aeropuerto de València celebró una concentración de 47 aeronaves, tipo avioneta, en un evento para rendir homenaje a los fallecidos y víctimas de la covid-19 el pasado mes de junio, así como a todos los trabajadores esenciales que han hecho frente a esta crisis sanitaria.

Airpull Aviation Academy, la mejor formación de Valéncia para ser piloto

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El acto, que contó con la participación de Airpull Aviation y Airpull Aviation Academy, dio comienzo en el Aeródromo de Requena, lugar desde el cual las 47 avionetas, procedentes de diferentes aeródromos (Alicante, Castelló, Requena, Olocau y València), partieron en formación de entre cinco y siete unidades, en intervalos de cinco minutos, con dirección al Aeropuerto de València. Allí fueron recibidos por el director del Aeropuerto de València, Joaquín Rodríguez Guerrero, y los pilotos desplegaron una lona en la que podía leerse: "En recuerdo a los fallecidos y en homenaje al personal esencial, de la Aviación General".