J. Mestre, Castelló

La crisis económica centró ayer la sesión de trabajo entre el delegado del Gobierno, Ricardo Peralta, y la junta directiva de la patronal de Castelló. El presidente de la CEC, José Roca, reclamó al Ejecutivo central medidas de apoyo al sector azulejero, y liquidez para las pyme.

El delegado del Gobierno recabó las principales inquietudes, aspiraciones y reivindicaciones de los empresarios de Castelló de cara a la cumbre financiera del G20, el 15 de noviembre en Washington, en la que participará España. «Es voluntad del presidente llevar el análisis más ajustado de la realidad de la crisis. Por ello quiere que tengamos un contacto directo con las organizaciones empresariales», afirmó el delegado.

Peralta escuchó de primera mano las principales preocupaciones de los agentes económicos de Castelló. Roca afirmó ante el delegado, en la rueda de prensa previa a la reunión, que las medidas promovidas por el Gobierno han llegado «tarde». No obstante, expresó su interés en que dichas iniciativas gubernamentales «fructifiquen» y que la inyección de liquidez se note «en el tejido empresarial de Castelló, donde predominan las pequeñas y mediadas empresas».

El presidente de la CEC advirtió asimismo de los efectos del desplome inmobiliario en el sector azulejero, y señaló que «si no se toman medidas adecuadas dejará de ser el más importante de la provincia y entrarán más industrias del sector en estado concursal».

El delegado del Gobierno por su parte resaltó las actuaciones aprobadas contra la crisis. Entre otras, enumeró la inyección de liquidez al sistema financiero, y las ayudas para facilitar el pago de la hipotecas y la recuperación del trabajo. También destacó el esfuerzo inversor del Ejecutivo central en Castelló. Peralta resaltó la reciente adjudicación del proyecto del AVE a Castelló, la variante de la N-340, así como la ampliación de la planta de gas de Sagunt que, según recordó, garantiza el suministro a la industria cerámica castellonense.