El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó ayer el anuncio de licitación de las obras de defensa de la playa de Almassora. Se trata de un ansiado proyecto, valorado en más de 2,9 millones de euros a cargo del Ministerio de Medio Ambiente, que permitirá frenar la erosión que existe en la playa de Benafelí y regenerar este tramo de costa de la localidad. El anuncio se produce siete años después de que el consistorio endureciera una reivindicación histórica.
El alcalde de Almassora, Vicente Casanova, avanzó el jueves a primera hora que la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar ya había trasladado los pliegos de condiciones al BOE para su publicación, por lo que el anuncio era inminente. El boletín recogió, 24 horas más tarde, la apertura del plazo a las constructoras para presentar ofertas para hacerse cargo de este proyecto.
Las firmas interesadas podrán hacerlo hasta el próximo 11 de agosto a las 14 horas, mientras que el 4 de septiembre el Ayuntamiento de Almassora abrirá toda la documentación técnica. El siguiente paso de este proceso será la apertura de las ofertas, que tendrá lugar en Madrid el próximo 9 de octubre. Las empresas interesadas en hacerse cargo de las obras tendrán que ajustarse a un presupuesto inferior a los 2.944.164,46 euros y ejecutar las obras de defensa de la costa en un plazo máximo de 14 meses.
Según las previsiones del equipo de gobierno, las máquinas llegarán al distrito marítimo antes de que acabe el año con la primera partida presupuestaria del proyecto, valorada en 300.000 euros. El grueso de la inversión se concentrará en 2015, que aglutinará 2,2 millones de euros. La recta final de los trabajos se producirá en 2016, momento en que el Ministerio de Medio Ambiente destinará 400.000 euros para los remates pendientes de las obras.
Eliminación de la escollera
La obra supone la eliminación de la escollera tipo T al sur de la playa y su sustitución por un espigón de 260 metros de longitud, con los últimos 75 metros sumergidos. La intervención a realizar también abordará mejoras en las escolleras de Ben Afelí y la situada frente a la ermita del Roser del Mar. Cabe recordar que los técnicos municipales alegaron en su día al diseño de Costas al entender que las soluciones planteadas no evitarían las inundaciones.
El alcalde de Almassora, satisfecho tras múltiples negociaciones y gestiones a caballo entre Castelló y Madrid, reconoció ayer que los vecinos «hemos esperado muchos años, quizás demasiados, para que este trámite sea una realidad». No en vano, el anterior Gobierno socialista ya se encargó de inaugurar parte de la intervención en la playa en 2007 y cerró el grifo de las inversiones a pesar de que las inundaciones continuaron en cada episodio de lluvias. «Pese a las intervenciones desarrolladas en la población, seguía y sigue en precario», incidió Vicente Casanova, para concluir con el deseo de que las obras resuelvan «con carácter definitivo la problemática que sufre históricamente nuestra costa».
