El concejal de Fiestas de Almassora, Arturo Soler, desgranó ayer el programa de actos en honor de Santa Quitèria que la localidad celebrará entre el 15 y el 23 de mayo, un día menos de lo habitual debido a la coincidencia con las elecciones municipales y autonómicas. La cita con las urnas obligará a introducir algunos cambios en el libro de fiestas, entre los que destaca la sustitución del tradicional castillo de fuegos artificiales por un «correfoc».
Soler incidió ayer en que de los 110 actos previstos por la concejalía que dirige, algunos incorporan novedades o cambios en el horario para adaptarse a las circunstancias de los comicios. El nuevo «correfoc» es uno de ellos. El departamento de Fiestas prescindirá del disparo habitual de los fuegos artificiales en la medianoche debido a que el sábado 23 todavía habrá actos taurinos en la Vila. Sería complicado, explicó el edil, movilizar a los vecinos hasta la calle Enrique Limo coincidiendo con la última noche de toros embolados.
Por este motivo, indicó, una carcasa de fuegos se disparará poco después de las 23 horas desde la plaza Pere Cornell y recorrerá varias calles del centro urbano hasta finalizar en la plaza de la Picaora. A continuación la charanga y la reina y sus damas se trasladarán hasta el casco antiguo para disfrutar de las últimas exhibiciones taurinas. El cartel de toros no sufrirá modificaciones a pesar del reclamo electoral.
Noche de humor el día 19
Entre las novedades de la próxima semana grande figura la Noche de Humor en la plaza Pere Cornell, prevista para el martes 19 de mayo, y espectáculos como el del mago Yunke o una exhibición de baile a cargo de una academia local. No obstante, el concierto de El Barrio, programado para la noche del sábado 16 es el principal reclamo musical de la localidad. La actuación se producirá fuera del Recinte Fester, que sí acogerá un tributo a Maná en la última noche de fiestas. Cabe recordar que la carpa estará inactiva desde el domingo 17 y hasta el jueves siguiente para garantizar el descanso de los vecinos.
Los actos que se mantendrán inalterables serán los más tradicionales, como la presentación de la reina de las fiestas, la romería a Santa Quitèria o la celebración de Les Calderes. No obstante, la coincidencia del día grande de las fiestas con el viernes, jornada en la que se celebra el «pa i porta», obligará a retrasar una hora el inicio de la cena, que arrancará a las 22 horas. Como novedad, el Ayuntamiento de Almassora ha programado un «resopar» a las cuatro de la madrugada para atender la demanda de los más jóvenes.
