En virtud del acuerdo de gobernabilidad entre PSPV, Més Nules, IPN y CCD los nueve concejales decidieron tras los comicios municipales elegir al candidato menos votado como alcalde. Desde entonces David García asume ese cargo, como no se cansa de afirmar, dando voz a la mayoría de vecinos que querían un cambio.
Las diferencias ideológicas entre los grupos que conforman gobierno son evidentes. ¿Cómo se hace para que la gobernabilidad sea posible y que las diferencias no se conviertan en un problema?
Al principio todos parecían dudar, incluso nosotros, no era un reto fácil. Pero la verdad es que en el equipo de gobierno están representadas todas las ideologías, derecha, centro, izquierda y nacionalismo, lo que hace inevitable trabajar más por el diálogo y el consenso. Y lo cierto es que está yendo todo rodado, los nueve miembros del equipo estamos trabajando al 120%. A España, cuando mejor le ha ido ha sido cuando había unión de diferentes formas de pensar, en la Transición. Y ahora también tenemos ejemplos, como el de Vila-real, donde el PSPV ha ganado por mayoría absoluta, pero ha seguido contando con el resto. Así me habría gustado que fueran las cosas en Nules, que el PP hubiera querido sumarse a este proyecto.
¿Cree que en 100 días es posible aplicar un programa de gobierno, o al menos comenzar a trabajar sobre él?
En 100 días no se pueden hacer grandes cosas, aunque sí que se puede conseguir que la gente note la intención y que cambien las formas de gobernar. Hasta ahora el ayuntamiento era inaccesible, las puertas estaban cerradas y ahora están abiertas permanentemente. El centro de todas nuestras acciones son las personas y eso la gente lo está notando.
¿Qué ha sido lo más fácil de estos primeros tres meses y qué lo más difícil?
El equipo está siendo lo más satisfactorio. Estamos trabajando muy bien, cada uno está asumiendo sus responsabilidades en sus áreas y la gente está apreciando los cambios, aunque estamos trabajando con los presupuestos anteriores y eso supone limitaciones. El 2016 será un gran año para Nules. En noviembre queremos que estén aprobados nuestros primeros presupuestos, para que empiecen a aplicarse en enero. Lo más difícil está siendo la burocracia, llega a ser desesperante, pero no solo en el Ayuntamiento, sino en todas las administraciones. Aunque la verdad es que los funcionarios están salvado muchas cuestiones. Hacen un gran trabajo.
Poco después de tomar posesión dijo que reconocía que el anterior equipo de gobierno había realizado una buena gestión económica. Después de este tiempo, ¿sigue pensando lo mismo?
La verdad es que tengo que matizar aquella afirmación. Se ha hecho una buena gestión económica porque el Ayuntamiento de Nules tiene un departamento de Intervención muy eficiente, no gracias a la gestión del gobierno anterior. Un buen ejemplo es que en 2014 no se cumplió con la regla del gasto. Sabemos por qué fue, por el pago de unas sentencias, pero debió realizarse un Programa Económico Financiero y no se hizo. El Tribunal de Cuentas nos ha advertido por incurrir en una responsabilidad contable, porque el PP cometió una irresponsabilidad política en 2015 al no subsanar este problema. Nosotros vamos a aprobarlo.
Dice que están trabajando ya en los presupuestos del 2016. ¿Cuáles serán las líneas maestras?
En septiembre se remitió un correo a todos los concejales con una serie de plazos para que cada cual propusiera sus proyectos para 2016, después cada uno se reunirá con Intervención para ver cómo se plasman económicamente. Pero ya puedo avanzar que habrá partidas que se reducirán seguro, como protocolo y órganos de gobierno, y otras que subirán, como Servicios Sociales.
¿Cómo valora el trabajo de la oposición en todo este tiempo?
Yo identifico dos momentos en la oposición. Un primer momento irresponsable, seguramente fruto de la desubicación al ver que perdían el gobierno. Creo que el PP no estuvo a la altura. En un segundo momento han pasado al silencio. Se lo comentamos todo, porque nuestro deseo sería que la oposición colaborara. Desde el primer momento manifesté mi intención de que incluso asumieran alguna delegación. Pero no están por la labor.
