El Ministerio de Fomento empieza de cero con el proyecto de la doble plataforma del AVE entre València y Castelló a pesar de contar con los trámites preparados cuando fue suspendido en 2011. Ha optado por licitar un nuevo estudio informativo, un primer paso que ya se aprobó en 2002, y establece un plazo de redacción de dos años. El Gobierno central constata de esta manera que el tercer raíl, que ha impulsado en los últimos años con una inversión de 200 millones de euros, es insuficiente al compartir las mismas vías la alta velocidad con los cercanías y los mercancías, pero aplaza el inicio de las obras a 2020.

El ministerio de Íñigo de la Serna anunció ayer en el Boletín Oficial del Estado la licitación del estudio informativo con un presupuesto de 655.154 euros, que también incluye la evaluación ambiental. Sostiene que este trabajo partirá de los informes previos que se llevaron a cabo de 2002 a 2011 y que «serán debidamente completados y actualizados a los nuevos requisitos técnicos y normativos».

Fomento resalta que este trabajo definirá una doble plataforma de 62 kilómetros que supondrá la separación de la alta velocidad del resto de tránsitos ferroviarios. Estos últimos discurrirán por las vías existentes en las que se ha desarrollado un tercer raíl para que circulen tráficos mixtos (en ancho ibérico e internacional). Fomento también licitó ayer la elaboración del estudio del túnel pasante de València con un coste de 455.000 euros.

El ministro explicó en una visita a Castelló en julio que la doble plataforma constará de una inversión de 1.170 millones y que el AVE alcanzará por la misma una velocidad de 350 kilómetros hora.

Planifica a largo plazo una propuesta que el exejecutivo de Rodríguez Zapatero paralizó hace seis años por los planes de austeridad. En 2002 se había aprobado un primero estudio informativo y en 2011 se bloqueó cuando estaban a punto de adjudicarse las obras- ya se había validado la declaración de impacto ambiental y se iban a comenzar las expropiaciones de terrenos-. Luego, el Gobierno de Mariano Rajoy, con el apoyo del Consell de Alberto Fabra, optó por un tercer raíl para traer el AVE a Castelló, una opción más barata que la doble plataforma pero que conllevará un AVE con menos condiciones.

Empresarios de las regiones del corredor mediterráneo y el Consell se han movilizado en los últimos meses reclamando la doble plataforma. Consideran que el tercer raíl ha consistido en un parche que no da solución a la demanda del tráfico de mercancías. Fomento atiende sólo en parte sus reivindicaciones; desbloquea el proyecto pero elude reactivarlo tal como quedó cuando fue paralizado, cuando la ejecución estaba a punto de adjudicarse. Ahora sostiene que el primer raíl es una primera fase de un corredor mediterráneo ferroviario que será completado con la doble plataforma de la alta velocidad. También afirma que el tercer carril ofrece de momento capacidad suficiente para las mercancías

Sin fecha en el tercer raíl

El citado tercer raíl acogerá dos convoyes de AVE al día entre Castelló y Madrid, más los trenes de cercanías, mercancías y media distancia. Según expertos de Adif consultados por este diario, será una especie de Alvia que no superará los 250 kilómetros por hora. Temen que afectará a la línea del Cercanías de Castelló al ir los dos tránsitos por las mismas vías.

Fomento sigue sin dar una fecha sobre la puesta en marcha del AVE del tercer raíl tras dar por acabadas sus obras en marzo y aduce que aguarda la confirmación de la Agencia de Seguridad Ferroviaria. Además, tiene pendiente un segundo carril entre Castelló y València para que se pueda transitar en ancho internacional en las dos vías existentes.

Fuentes consultadas de Adif apuntan que las obras de este segundo raíl, que podrían arrancar a primeros de 2018, volverán afectar al Cercanías de Castelló si se planifican igual que las anteriores, que recortaron la flota de la C6 a la mitad mientras se llevaron a término.