La Policía Local de Orpesa precintó ayer las instalaciones de un circo ambulante después de que el consistorio le haya denegado la licencia eventual para la actividad al detectar distintas deficiencias y falta de documentación en la tramitación de la misma. El circo, ubicado en un solar de la avenida València, había estado realizando funciones seis días a la semana desde el pasado 13 de julio, según la información de su página web. El edil de Compromís Josep Lluís Romero reclamó explicaciones el pasado jueves por la situación del circo.

El circo presentó un escrito de subsanación de deficiencias después de que el consistorio notificara a la empresa circense las deficiencias que previamente había detectado el ingeniero municipal durante la tramitación de la licencia, todo ello después de que, según el calendario que el circo tiene en su web, el circo hubiera iniciado ya las exhibiciones. Según la información del circo, las funciones comenzaron el 13 de julio y se han ido programando de lunes a sábado a las 21:30 horas. El único domingo que abrieron fue el 15 de julio.

El informe municipal detectó discrepancias en cuanto al aforo de algunas zonas, la anchura de las salidas y los horarios de las funciones, así como la injustificación de la normativa acústica autonómica y municipal, entre otros aspectos. Además, el arquitecto indicó que faltaba aportar documentación relativa a la acústica o la instalación eléctrica. Del mismo modo, el funcionario hace constar las denuncias y quejas de los vecinos de las zonas residenciales colindantes por las molestias de ruido que les ocasionó la actividad.

Por ello, el consistorio emitió una resolución de alcaldía para denegar la licencia eventual de la actividad siguiendo las consideraciones del informe municipal, así como la paralización de la actividad en caso de que esta continuara vigente. La Policía Local precintó ayer a las dos de la tarde estas instalaciones circenses situadas en un solar de la avenida Valencia. Este diario se puso en contacto con el equipo de gobierno para obtener una valoración y nadie quiso hacer declaraciones.

El concejal de Compromís Josep Lluís Romero registró el jueves un escrito para que los agentes locales comprobaran si se contaba con la licencia y, en caso negativo, exigió que se cumpliera «de forma escrupulosa» la resolución de alcaldía que ordenaba la paralización de la actividad. Romero ha tenido acceso a dicha resolución «en atribución de mi cargo como concejal».