Desde el pasado sábado el Ayuntamiento de Atzeneta del Maestrat se ha visto obligado a restringir el suministro de agua potable pidiendo a los vecinos que ahorren lo máximo posible. El motivo: justo en el fin de semana en el que el municipio cuenta con más habitantes se averió la bomba del pozo principal.
«De manera habitual somos 1.200 vecinos, en el último fin de semana de fiestas llegamos a 3.000. El consumo pasa de 100.000 litros diarios a 1 millón de litros». Es como explica el alcalde, Santiago Agustina, la realidad sobre el consumo en la localidad.
Durante el pasado fin de semana el municipio vivía el colofón de sus fiestas. Estaba lleno de descendientes del pueblo y visitantes que aprovechan las celebraciones para visitar la población. Y la bomba del pozo principal «se quemó». Desde el ayuntamiento, a través de los bandos por whatsapp y redes sociales, se informó sobre la necesidad de restringir el consumo «y la gente afortunadamente nos hizo caso, el consumo se redujo drásticamente y el agua del pozo más antiguo, que tenemos de reserva, ha sido suficiente para el abastecimiento de las viviendas», comentaba el alcalde satisfecho por la respuesta de los vecinos.
Tras conocerse la rotura de la bomba el consistorio contactó de manera inmediata con la empresa especializada que se encargó del montaje. Los trabajos de reparación no han cesado desde el sábado y se prevé que, si todo funciona correctamente, hoy martes la normalidad vuelva al suministro con la puesta en marcha de la bomba reparada.
Atzeneta del Maestrat se suministra de dos pozos. Durante 18 horas funciona el principal -el que se ha averiado- y el resto del tiempo se saca agua del más antiguo.
Desde que se produjo la avería desde el consistorio se ha realizado un seguimiento continuado del volumen de agua almacenada en el depósito. Superado el fin de semana poco a poco todo volverá a la normalidad.
«Ayer en el pueblo ya había menos gente y se notó en el consumo. Según me ha comunicado el alguacil en el depósito se mantenía el nivel para garantizar el abastecimiento hasta hoy», apuntaba aliviado el alcalde.
Conocedores de la situación de abastecimiento de agua en el pueblo desde la corporación están trabajando para prevenir este tipo de situaciones. El municipio, a través de la dirección general del Agua, está construyendo un nuevo depósito que tendrá una capacidad de más de un millón de litros. De este modo se conseguirán dos objetivos: multiplicar la capacidad almacenamiento y mejorar la presión del agua que llega a las viviendas de la parte alta del núcleo urbano, ya que el depósito se ha construido en un punto más elevado.
