A pesar de la derrota ante el Olot (1-2), que hizo añicos la racha de nueve jornadas sin perder y además le quitó el liderato al Villarreal B, el técnico Miguel Álvarez está contento por cómo esta respondiendo el equipo en este primer tercio del campeonato liguero. «En el fútbol pequeños detalles te rompen toda la planificación de la semana. Nos pasó el domingo con el penalti en contra. Fue definitivo, fue el 1-2. Antes, tuvimos tres o cuatro ocasiones para meter nosotros el 2-1, pero no acertamos», dijo el experimentado entrenador jienense.

Pero ese partido ante el Olot ya es historia. Ahora toca centrarse en el partido de mañana contra el Espanyol B en el Mini Estadi (12.00 horas). «Será un partido como el del Barcelona B: bonito. Dos canteras de un nivel muy alto. Ellos son muy parecidos a nosotros, con automatismos muy parecidos. También una plantilla con una media de edad muy baja», destacó Miguel Álvarez. Además, se mostró convencido de que sus muchachos se lleven los tres puntos en este envite. «Confío mucho en mis chicos y seguro que harán un gran partido», agregó.

Mañana se cumplirá un tercio de la temporada (trece partidos) y el veterano entrenador del Villarreal B reconoció que «el equipo va madurando y los jugadores están progresando adecuadamente. No me escudo en las bajas porque aquí quien sale lo hace bien. La semana pasada les tocó jugar a Sergio Lozano y a Fran Álvarez y estuvieron muy bien. Ahora no podemos contar con Samuel Chukwueze porque está con el primer equipo, y eso es bueno para que el resto de jugadores se vean reflejado en él».

Las bajas

Para el partido de mañana el filial amarillo de Álvarez no podrá contar con los lesionados Enric Franquesa, Emmanuel Lomotey y Manu Mornales, aparte del ya citado extremo Samuel Chukwueze que está con su selección (Nigeria), ya habitual con el primer equipo. Los que sí que volverá a estar disponibles son Roger Riera, una vez cumplida la sanción, y Carlos Blanco y Adrián Riera una vez se han recuperado de sus lesiones. La enfermería da un respiro a Miguel Álvarez, que tendrá más margen de maniobra en sus planteamientos.