La alcaldesa, Amparo Marco, del PSPV, augura que «2019 será un año decisivo para el futuro de Castelló». «El Ayuntamiento encara los últimos meses del mandato actual con el objetivo de alcanzar el mayor grado de cumplimiento del programa de gobierno del Pacte del Grau, que promovió el cambio político, un ambicioso proyecto que está suponiendo una transformación permanente de la ciudad, con un nuevo modelo urbanístico e iniciativas dirigidas al desarrollo económico, bienestar, igualdad y progreso social», destaca.
Marco destaca que las concejalas y concejales con responsabilidades de gestión están ultimando los proyectos pendientes para posibilitar que sean una realidad en los próximos meses y, con ello, rendir cuentas de las responsabilidades adquiridas ante la ciudadanía en 2015. «El Pacte del Grau es nuestro contrato con la ciudadanía. Firmamos un documento que sintetizaba el anhelo de cambio y la voluntad de transformación de la ciudad tras un periodo de 24 años de desgobierno y uso inadecuado de las instituciones», apunta.
El tramo final del mandato permitirá avanzar en el nuevo Plan General, que restituirá la legalidad urbanística tras la anulación del PGOU en 2008, durante el gobierno de derechas. Al nuevo modelo de ciudad, se unirá la ejecución de un paquete de inversiones en infraestructuras, entre las del presupuesto municipal y las financiadas con fondos europeos Edusi, que supondrán una inyección de 20,2 millones de euros hasta 2022.
El cambio en la fisonomía urbana es perceptible en proyectos significativos como las obras antiinundaciones en la Marjalería , la remodelación de la avenida Enrique Gimeno y el parking verde frente al Hospital General, la ampliación de la red de carriles-bici, la 'supermanzana' de Maestría, la rehabilitación del Palacio Municipal, la recuperación del Castell Vell y la reforma del Maset Blau. Otros proyectos relevantes han sido el Plan de Reforma de Infraestructuras Educativas, la nueva sala de Emergencias en Tetuán 14 (ahora ya de propiedad municipal en su totalidad), la instalación de WC públicos, los presupuestos participativos y el desarrollo del plan Smart City.
Otras actuaciones ambiciosas están en fase de desarrollo, como el Corredor Medioambiental del Río Seco, con el nuevo puente que coserá la zona oeste, la mejora de la seguridad vial en el Camí La Plana, las remodelaciones de las plazas Josefina López y el parque de la Panderola en el Grau o el Parque Agrario. El proyecto técnico de rehabilitación de los antiguos juzgados de Borrull está terminado, el centro sanitario del Raval Universitario que promueve la Generalitat está a punto de comenzar y la estación intermodal de mercancías será una realidad a medio plazo.
El presupuesto municipal de 2019 mantendrá el apoyo a las políticas de promoción económica y al reforzamiento de los programas de empleo, que en los últimos cuatro años han experimentado un incremento de un 650%. La línea de ayudas sociales también se ha reforzado en este periodo, hasta casi triplicar las de la época del PP, y se mantendrá en esta recta final. En el área social ha destacado la recuperación de la teleasistencia y la recuperación y ampliación del Centro de Alzheimer La Pineda, cerrado en 2012 por el gobierno anterior, y la reconversión de la Casa de Cultura en un novedoso centro para el envejecimiento activo. Castelló ha sido declarada Ciudad Amigable con la Gente Mayor y Unicef la ha reconocido como Ciudad Amiga de la Infancia
