La alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, mantuvo una reunión con representantes de la Unió de Llauradors, de cooperativas como la de San Alfonso y San Isidro y productores locales para escuchar las peticiones de los agricultores y estudiar las posibilidades de colaboración del consistorio. Marco garantizó que les tenderá la mano para «abrirles puertas en otras administraciones como la Generalitat, el Gobierno Central e incluso el Europarlamento y defender junto a ellos las demandas de este sector».

A nivel municipal plantea impulsar este sector económico a través del turismo. «Cada año son más los visitantes de dentro y fuera de nuestras fronteras que vienen a Castelló y que están encantados de comprar nuestros productos locales», subrayó. Así, también propuso destinar más recursos en campañas de sensibilización para que los consumidores compren el género de kilómetro 0. La primera edil destacó que están estudiando la posibilidad de crear un día fijo de mercado donde se venda de manera exclusiva el género de los agricultores de la ciudad. «Es una manera de poner en valor el producto local y a la vez dar a la ciudadanía y al turista la garantía de que lo que compran es de calidad, producido con responsabilidad y en esta tierra», resaltó.

El portavoz de Compromís per Castelló, Ignasi Garcia, defendió al sector agrícola de la naranja frente a la ratificación del acuerdo que permite la entrada de naranja sudafricana en Europa. Garcia afirmó que «en el Senado, solo Compromís votó en contra de la revalidación de la entrada de naranja sudafricana en Europa, hecho que crea una competencia desleal a nuestro sector citrícola».

Compromís afirma que llevó al Congreso la enmienda para activar la cláusula de salvaguarda y que el Gobierno central se opuso. «Crea mucha vergüenza ver a Pablo Casado y a otros dirigentes del PP haciéndose los defensores de la naranja cuando son ellos los responsables del problema que está sufriendo nuestro campo», abundó Garcia, recordando que el PP votó a favor del tratado de la UE-Sudáfrica.