Los talleres falleros de Borriana viven estos días una gran actividad debido a la cercanía del día de la Plantà, el próximo 15 de marzo. Una actividad que ha sido un tanto especial en un taller cercano a la avenida Jaume I. Y es que en este espacio varios artistas falleros han compartido sus horas de trabajo con unos ayudantes únicos: seis usuarios de la unidad de salud mental que han realizado unas prácticas no laborales en diferentes talleres falleros.
Como indican desde la Asociación de Familiares para los Derechos de las Personas con Enfermedad Mental (Afdem), en Borriana solo hay una unidad de salud mental, sin recursos específicos para que las personas con enfermedad mental puedan llevar a cabo los programas de rehabilitación que les ayuden a tener una vida digna y completa. Es por ese motivo por el que desde la asociación se plantearon llevar a cabo un nuevo proyecto en el que, a través de las fallas, se podría conseguir una mejora en la calidad de vida de las personas y su integración en la población en general.
Con el apoyo del Ayuntamiento de Borriana, la coordinación con la unidad de salud mental (encargados de la derivación de los usuarios) y con la colaboración desinteresada de los artistas falleros, los usuarios han realizado estas prácticas. Así, cada uno de los seis usuarios ha contado con un tutor durante los aproximadamente tres meses de duración de las prácticas.
Así, Javi Capella, José Luis Pascual, Paco Fuentes, Rafa Ibáñez, Loren Fandos y Vicente Martínez han trabajado codo con codo con los seis hombres y mujeres, de edades comprendidas entre los 20 y 48 años. Una de esas parejas que han compartido horas de trabajo es la compuesta por José Luis Pascual ('Pepi') y Alfredo Beteta y como comentaba el artista fallero, «es una terapia espectacular y al ser un proyecto muy creativo les aporta grandes beneficios ya que se les pide su opinión y se les hace partícipes en todo momento».
'Pepi' trabaja en la confección de las fallas Barri d'Onda, Caçadors, y Ortega de Borriana, en dos de Torrent, una de Benifaió y otra en Almussafes, pero a pesar de la gran cantidad de trabajo no dudó en participar en este proyecto. Por su parte, Alfredo Beteta comentaba que el comienzo de las prácticas fue un poco duro «porque no tenía ninguna habilidad, me hacía daño con las grapas,...» pero tras el proceso de aprendizaje, Alfredo, al igual que el resto de sus compañeros, han adquirido nuevas habilidades, «he notado una gran mejoría» y, además, han ampliado habilidades sociales «ya que antes eran muy tímidos y ahora han cogido más confianza y pueden hablar con más gente», comentaba Cristina Vilar, psicóloga y responsable de la delegación de Afdem Borriana.
La experiencia realizada por primera vez en Borriana ha sido tan positiva que los artistas que han participado repetirían, «porque nosotros también hemos aprendido mucho de ellos», añadía 'Pepi' quien ha forjado una gran amistad con Alfredo.
