El juvenil B del Valencia fue como un martillo pilón. Insistió, insistió y al final lo consiguió. Hizo claudicar a un Castellón que peleó todo lo que pudo y más, pero dobló las rodillas mediada la segunda parte. El extremo Guille Lozano, quien asistió en el primer gol y anotó el segundo (suma once), fue una pesadilla para los albinegros, que ven como ahora se les complica el ascenso de categoría a División de Honor.
Plantaron cara los orelluts de Javier Balaguer. Buena primera parte para los de la capital de la Plana, aunque la escuadra valencianista tuvo la situación bastante controlada, a pesar de llegarse al intermedio tal y como comenzó el partido: 0-0. Un marcador que no era del todo malo.
Apretó más el juvenil B, que es líder del grupo y defiende esa posición. Lo que se veía venir llegó en el minuto 64: Koke Pastor puso el 1-0 al rematar un centro del omnipresente Guille Lozano. El gol espabiló un poco al Castellón, pero careció de mordiente en los metros finales. Y claro, el 2-0 fue la puntilla. Llegó en el minuto 76. El lateral cadete David Ruiz se la puso larga a Guille Lozano.
Este se fue como una bala. Nadie le pudo detener y ante Joan Pitarch no le tembló el pulso y decidió el choque.
