Nuevo revés para el Villarreal C, que curiosamente no encuentra la fórmula para ganar como local en todo lo que va de 2019. El sábado ante el Paterna el segundo filial amarillo logró empatar en el minuto 88, pero en el 94 encajó el 2-3 y le dejó sin premio. «El fútbol nos está pegando muchas ostias», reconoció el técnico Pere Martí, cariacontecido por la derrota sobre la bocina y sin tiempo de reacción.

«Tenemos que levantar la cabeza y pensar en el próximo partido. Ahora no se puede hacer nada más que pasar página», dijo el joven entrenador moncofense. Se lamentó por la facilidad con la que encajó goles su equipo. «Creo que los tres eran bastante evitables, y delante tuvimos ocasiones para haber marcado alguno más», se lamentó. «El fútbol es así de bonito por todas estas cosas, que cuando parece que lo tienes todo controlado se descontrola, unas veces a favor y otras en contra», afirmó el preparador.

Pere Martí destacó que «hay que coger esto como un gran aprendizaje para los chavales. De las derrotas también se aprende, aunque a todos nos gusta aprender a través de las victorias. Toca ya pensar en el encuentro del próximo domingo en el campo del Crevillente».

En este 2019, como local, el Villarreal C llega disputados seis partidos que saldó con dos empates y cuatro derrotas. Todavía no ha ganado en casa. Las dos únicas victoria en estos casi cuatro meses las logró lejos de casa, ante el Silla y el Acero.