Pere Martí, el entrenador del Villarreal C, lamentó que ahora que su equipo está a un gran nivel esté llegando el final de temporada. Sólo restan dos partidos para acabar la fase regular y al segundo filial del submarino sólo le quedan dos citas contra equipos que se juegan la permanencia: el Rayo Ibense y el Torre Levante. «Estamos a un gran nivel y ojalá quedase un poco más de Liga. Los chavales se encuentran muy a gusto», dijo el técnico moncofense del segundo filial amarillo.

«Sólo nos quedan dos compromisos y serán contra equipos que sí que se están jugando mucho. Tendremos que mantener el nivel, no relajarnos en ningún momento porque de lo contrario los rivales nos pasarán por encima», avisó el entrenador del Villarreal C, que está en mitad de la tabla y sin ninguna aspiración ni por arriba ni por abajo en esta recta final del campeonato liguero.

El sábado su equipo perdió en casa contra el Olimpic, un rival experimentado que con la ley del mínimo esfuerzo se llevó los tres puntos del Mini Estadi y se aseguró la fase de ascenso a Segunda B. «Al descanso me fui muy contento por lo que había visto, a pesar del 0-1. Y la segunda mitad fue de dominio nuestro y fue una lástima no haber podido empatar el partido», se lamentó Pere Martí. Enfrente estuvo un rival con mucho oficio. «Si está ahí arriba es por algo», aseguró el preparador del equipo amarillo.

«El equipo hizo una primera parte muy seria, y en los veinte últimos minutos del segundo tiempo supieron gestionar bien el 0-1, dejando jugar muy poco. Hay que darle mérito al esfuerzo de los chavales por intentar, sin éxito, el empate», concluyó el técnico del Villarreal C.