El alcalde de Vila-real, José Benlloch, lamentó ayer el «grave atentado» a la democracia que supone la querella contra las tascas de la calle Padre Molina, el propio alcalde y la edil de Seguridad Ciudadana, Silvia Gómez, presentada en plena campaña electoral y en fiestas de Sant Pasqual, «para intentar influir en los vecinos a través de la difamación y las mentiras». «Todo esto huele muy mal; no sabemos todavía qué hay detrás, pero lo sabremos», señaló Benlloch, quien agregó que se ha puesto ya el tema en manos de los abogados y que incluso puede estar cometiéndose un delito electoral: «El artículo 148 de la ley advierte de la aplicación del grado máximo de las penas en los delitos de calumnias que se produzcan en periodo electoral», advirtió.

«Sé muy bien lo que es padecer la guerra sucia, ataques permanentes, cuatro denuncias que me presentaron la pasada legislatura? Mentiras que fueron archivadas, como mentira es todo lo que se está diciendo ahora. A día de hoy, no he recibido ningún gesto de apoyo de ningún miembro de la oposición municipal, lo que revela que están trabajando de la mano para ver si sumando, como han hecho en Andalucía, pueden echarnos. Unos, porque quieren volver al ayuntamiento para defender sus empastres y los intereses de partido; otros porque sólo quieren llegar al poder a costa de lo que sea», lamentó el alcalde, quien puntualizó que, por el momento, no ha llegado ninguna notificación oficial de la querella de las tascas. «Lo que ha pasado en Vila-real es gravísimo. No estoy acusando a nadie, pero los silencios y la utilización posterior de la situación es bastante elocuente, en una vergonzosa guerra sucia que algún día conoceremos», agregó.

En cuanto a los motivos de la querella, Benlloch señaló que «no niego que los vecinos puedan tener problemas, pero lo que es rotundamente falso es que no se haya hecho nada. Hemos abierto un expediente completísimo, se ha evitado que la zona se convierta en un botellón, se ha limitado la actividad de 20.00 a 22.00 horas, de manera que no afecta el horario de descanso e incluso se planteó a los vecinos una modificación de la normativa para regular mejor la situación, que no quiere decir que hasta ahora no se haya regulado».