El puerto de Castelló garantiza a los barrios del sur que el futuro acceso ferroviario será modificado respecto al proyecto inicial e irá totalmente soterrado en la trama urbana -hasta el grupo Roquetes-. Desde este punto continuará en trinchera el máximo tramo posible hasta la dársena sur para minimizar la afección al territorio. Esta conexión, que tendrá ancho mixto, el puerto con el corredor mediterráneo. Su objetivo es potenciar el tránsito de mercancías de PortCastelló con Europa y polos logísticos de España de Madrid, Aragón y el País Vasco.
La propuesta primigenia llevó la preocupación a los vecinos de los grupos periféricos del sur de Castelló ya que contemplaba parte del trayecto al descubierto en sus proximidades, lo que amenazaba con generar una barrera urbanística. Concretamente preveía una doble plataforma, mientras la electrificación de la misma era una posibilidad y la zona cubierta únicamente comprendía cuando atravesaba carreteras. El presidente de PortCastelló, Francisco Toledo, encomendó al equipo redactor una serie de cambios para reducir la afección, entre otros, pidió prolongar la parte soterrada y en trinchera. Según el responsable portuario, el nuevo proyecto constructivo contempla que el acceso discurrirá tapado desde su inicios de la red ferroviaria (entre Castelló y Almassora) hasta el grupo Roquetes.
Asimismo, solo se construirá una plataforma y no dos, lo cual también disminuirá a la mitad la anchura de la trinchera Por otra parte, la línea ferroviaria, que tendrá una longitud de 8 kilómetros, irá totalmente electrificada hasta la estación intermodal y rebajará el impacto de las locomotoras.
Toledo confía que antes de que termine el mes de julio esté concluido el nuevo proyecto constructivo. Este informe evaluará su coste definitivo y concretará y la financiación, que será compartida entre el Ministerio de Fomento y la propia Autoridad Portuaria. El coste de la inversión está estimado inicialmente en los 100 millones de euros. El puerto espera que Fomento pague el trazado desde la estación hasta el corredor mediterráneo, mientras la Autoridad Portuaria se haría cargo del enlace restante y la estación intermodal.
En julio también se prevé presentar el estudio funcional de la intermodal, que se ubicará antes de la dársena sur. El estudio preliminar de la intermodal proyecta un tráfico anual de un millón de toneladas en el primer año de su entrada en funcionamiento. El movimiento de contenedores alcanzaría los 18.206 Teus el primer año de la vía y los 37.475 en 2044.
