Reuniones por separado pero orientadas hacia el mismo camino: reeditar el pacto de las formaciones de izquierdas que se convirtió en 2015 en el Acord del Grau y que rompió el monopolio del PP en el Ayuntamiento de Castelló durante 24 años. Tras una semana de silencios y ambigüedades por parte del Partido Socialista, abriendo el abanico de tres posibilidades para el ayuntamiento que se forma este sábado 15 de junio, la tarde de ayer lunes fue la de las reuniones del PSPV con la confluencia Podem/CseM/EUPV, por un lado, y con Compromís, por otro. Y tras ellas, la sensación transmitida por todos, de forma individual, es la de haber sentado las bases para que el acuerdo de gobierno y la configuración de un tripartito sea la opción ganadora, dejando de lado la posibilidad de un acuerdo PSPV-Ciudadanos o de un gobierno en minoría.
Las reuniones fueron por separado, con los socialistas manteniendo un primer encuentro con la comisión negociadora de Podem y, tras ella, con la de Compromís. Al finalizar, sendos comunicados en los que dejan entrever que ha habido buena sintonía entre las partes, por lo que raro sería que de los contactos que va a haber a lo largo de la semana no se certifique un pacto definitivo.
Como se recordará, las elecciones del pasado 26M dejaron al PSPV con 10 concejales, al PP con 7, a Ciudadanos con 4, a Compromís con 3, a Podem con 2 y a Vox con 1. La composición del ayuntamiento, con 27 concejales, deja en 14 la mayoría absoluta, por lo que la posibilidad de un acuerdo de gobierno entre PSPV, Compromís y Podem sumaría 15 ediles.
Cordialidad
Sobre la reunión entre PSPV y Podem, destacaron en un comunicado conjunto que el encuentro, en la sede socialista de la capital, discurrió en un ambiente de cooperación y cordialidad y se cerró «con una sensación de satisfacción mutua». En la cita, a las 17 horas de ayer, se abordó la definición de un marco programático para dar estabilidad al Gobierno municipal. El PSPV planteó que el contenido de un eventual pacto de gobierno debe girar en torno al programa electoral socialista, «que fue avalado en las urnas por más de 25.000 ciudadanos y ciudadanas». Un programa, según señalan, ajustado a los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, «que se completaría con las propuestas procedentes del programa electoral de la confluencia». Las comisiones negociadoras han acordado por ello mantener reuniones específicas a lo largo de la semana para avanzar en el desarrollo del contenido de un eventual programa de gobierno.
Otro de los aspectos abordados ha sido el de la estructura municipal y el interés de UP-CSeM-EU por asumir responsabilidades de gobierno. Desde el PSPV se ha planteado un nuevo diseño de las áreas de gestión municipales, mientras que la confluencia ha explicitado la intención de asumir concejalías relacionadas con la sostenibilidad ambiental y las políticas de vivienda municipales. La comisión negociadora socialista, según señalan, ha sido receptiva a las propuestas y considera que «serían asumibles en un eventual acuerdo».
Salomé Agudo, una de las integrantes del comité negociador de Podem, mostró su satisfacción «por haber empezado ya unas negociaciones que considerábamos prioritarias de cara a la conformación de un gobierno de progreso». Agudo se va con la sensación de «haber constatado que hay sintonía en los temas que consideramos prioritarios», pero señaló que aún debe haber más encuentros.
Tras confirmar su clara intención de asumir labores de gobierno -algo que rechazó en 2015 Castelló en Moviment-, avanzó que «les hemos dejado patente nuestra disposición ostentar la gestión de áreas que creemos no se han llevado bien, como vivienda o medio ambiente, a las que uniríamos temas energéticos y de movilidad». De todas formas, señaló que «ha sido una primera toma de contacto», a la espera de un nuevo encuentro bilateral y una reunión a tres bandas, aún sin fechas.
Compromís
Por lo que respecta al encuentro con Compromís, a las 19.00 horas, se centró en este primer día en consensuar programas, sin que desde la formación valencianista se plantease, como sí habían hecho desde Podem, el hablar de las áreas que les gustaría gestionar, de ahí que se desconozca si podría haber conflicto de intereses con Podem.
Rafa Simó, del equipo negociador del PSPV, calificó de positivas ambas reuniones al destacar los avances en organigrama municipal, estructura organizativa y temas programáticos, apuntando que se «se dan nuevos pasos para conseguir un nuevo acuerdo de gobierno». Eso sí, apuntó que, aunque nos vamos con buenas sensaciones, «no estamos todavía en disposición de cerrar ninguna puerta», en alusión a si ya estaba descartado cualquier acuerdo con Ciudadanos.
Verònica Ruiz, del comité negociador de Compromís, también destacó su satisfacción «por que tenemos propuestas comunes del programa de gobierno y por la experiencia de estos cuatro años». Sobre la reedición del Pacte del Grau, señaló que «esa es nuestra voluntad y trabajaremos duro para renovarlo porque pensamos que podemos hacer juntos un gran proyecto de ciudad».
Por parte de Compromís se ha aportado una selección de 78 propuestas de su programa electoral con el objetivo de que estas puedan debatirse por las comisiones e incorporarse al documento político de acuerdo programático, algo que deberá definirse los próximos días.
