La firma del acta de replanteo, suscrita ayer en Almassora, confirma que el colegio Regina Violant será el primer proyecto de la nueva legislatura en la localidad. Los responsables de la empresa Añil Servicios, Ingeniería y Obras confirmaron ayer junto al recinto de obras que la edificación arrancará la próxima semana con el montaje de las casetas de obra y la entrada de la maquinaria pesada.
La alcaldesa de Almassora, Merche Galí, y la nueva concejala de Educación, Raquel Barberá, asistieron a la firma del acta de replanteo, el trámite que permite el inicio de los trabajos, junto a la dirección de la obra y los delegados de la Conselleria de Educación, además de la propia adjudicataria de los trabajos y el concejal de Hacienda, Santiago Agustí.
La empresa ha hecho acopio de materiales y ha planificado la distribución de unos trabajos valorados en 5.321.608,86 euros y que permitirán acabar la construcción que abandonó la anterior mercantil, Torrescámara. La nueva firma ha confirmado tener todo a punto para acelerar los trabajos y cumplir el plazo máximo de 15 meses para la conclusión del proyecto diseñado por los técnicos municipales.
En el tema de plazos, desde la Conselleria de Educación informaron ayer que es la empresa adjudicataria la encargada de iniciar el calendario para iniciar las obras. «Nos han comunicado que entre el próximo viernes y principios de la semana que viene comenzarán a llevar material y casetas para reiniciar la obra», confirmaron fuentes del Consell, al igual que desde el ayuntamiento.
El centro proyectado en el solar que antaño ocupó el campo de fútbol La Garrofera contará con tres líneas educativas formadas por nueve unidades de Infantil, dieciocho de Primaria y un comedor escolar sobre una superficie construida de 7.127 metros cuadrados. La edificación del Regina Violant pondrá fin a más de una década de actividad en aulas prefabricadas y dará paso «a que el alumnado y el profesorado disfruten de un colegio de verdad después de años y años en una situación precaria», según la alcaldesa.
Galí resaltó la «enorme satisfacción por ver desbloqueado un proceso que marcó la anterior legislatura y que es nuestra prioridad en ésta que acaba de empezar». «De hecho, el acta de replanteo es el primer trámite en salir adelante tras la constitución de la nueva corporación municipal», indicó a los responsables de la Conselleria de Educación y de la empresa reunidos a las puertas del recinto de obras.
Galí se muestra «confiada»
La primera edil se mostró «confiada en la seriedad de la empresa, que desde el momento de la adjudicación ha ido informando de los pasos a seguir y de su calendario de trabajo». De este modo, espera que la comunidad educativa y la AMPA, «que tanto ha luchado por el centro, puedan trasladarse pronto al nuevo edificio».
El reinicio de las obras del colegio Regina Violant pondrá en marcha la cuenta atrás para que la obra tan esperada por la comunidad educativa concluya y los alumnos del centro educativo puedan abandonar los barracones tras casi una década acudiendo a clase en estos.
