Alberto Montañés y Maria Dávila son dos jóvenes castellonenses, originarios de Onda, que han emprendido con un restaurante de carácter rural, que apuesta por la cocina de autor y de kilómetro cero con el que plantan cara al fenómeno de la llamada 'España vaciada'. Alberto es el copropietario y chef principal del restaurante. Con tan solo 31 años, Alberto ha trabajado en restaurantes de alta gastronomía y Estrellas Michelin como Simon Radley (Chester, Reino Unido) y Montia (El Escorial, Madrid), junto a grandes chefs del momento, influencias que se pueden apreciar en la composición de su menú. Por otro lado, Maria Dávila, con 28 años, es también propietaria del restaurante, jefa de sala y su sumiller aunque toda su trayectoria profesional hasta el momento ha sido de carácter periodístico y social, colaborando en diferentes ONG y proyectos sociales.

La propia Maria admite que la mayoría de sus conocidos "se echaban las manos a la cabeza cuando les dijimos que queríamos emprender en Mosqueruela" porque desgraciadamente hay muchas personas que dan "por perdidos los proyectos fuera de las capitales". Ante la incredulidad de su entorno, esta joven explicaba que "más que nunca, como personas jóvenes, teníamos que comenzar a romper esa tendencia”. Tanto Maria como Alberto han vivido en ciudades como Barcelona, Madrid, Londres, Edimburgo, Liverpool, Valencia o Castellón, por lo que podrían haber escogido iniciar su andadura gastronómica en cualquiera de estas ciudades. “Desde hace un par de décadas una gran parte de los restaurantes que se establecen en los centros de las ciudades tienen únicamente un objetivo monetario, por lo que se están convirtiendo en sitios de comida rápida, donde todo va deprisa para seguir aumentando la caja lo más rápido posible. Por eso queríamos emprender aquí, en el pueblo de mis abuelos, para ofrecer cocina silvestre, estacional y local”, reconoce Alberto, preocupado por la tendencia del mercado de la restauración de los últimos años.

Un negocio en auge durante la pandemia

'Existe Mosqueruela', el nombre del restaurante, es uno de los pocos negocios que se han impulsado durante la pandemia por covid-19 y que ha crecido durante la crisis en un pueblo rural que tiene una población actual de aproximadamente 500 habitantes, aunque Maria reconoce que “la mayoría de clientes son de Castellón”.

En los próximos meses, el local prevé aumentar su cuota de mercado consiguiendo el desplazamiento de ciudadanos residentes en las grandes ciudades hacia Mosqueruela para vivir la experiencia culinaria que ofrecen. Mirando hacia el futuro, ambos reconocen que “estamos pensando en nuestro próximo proyecto, aunque lo único que tenemos claro es que será también en un entorno rural”.