La reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJ) que anula la concesión administrativa de la zona deportiva del puerto de Gandia al Real Club Náutico de esta ciudad ha derivado en la dimisión del presidente, Daniel Vidal, un hecho que él comunicó a los socios a finales de la semana pasada.

Como publicó este periódico, el TSJ dejó sin efecto la decisión de la Autoridad Portuaria de València (APV) de excluir a la empresa Alcara en el concurso para quedarse con la concesión del Náutico por un periodo de 20 años, de manera que ahora la APV está obligada a volver a valorar las dos ofertas, la del Náutico y la de Alcara, para determinar cuál es la mejor y, consiguientemente, la que se quedaría con la gestión de ese espacio.

La sentencia se produjo cuando el Náutico ya había iniciado las obras de remodelación integral de las instalaciones, comenzando por el derribo del club social, para, después del verano, proceder a la construcción de los nuevos edificios diseñados, que contemplan una marina abierta y muy comercial, similar a la existente en el Club Náutico de Dénia.

Ante la complicada situación que esta sentencia ha generado, Daniel Vidal anunció su dimisión a la Junta Directiva de la entidad. Según ha señalado a este periódico el ya expresidente, que llevaba tres en el cargo y siete en la directiva, hace meses que tenía meditada esta renuncia, pero sin duda la resolución judicial ha precipitado que deje el cargo.

Su puesto lo asume el hasta ahora vicepresidente, David González Levallois, que se encargará de dirigir el incierto futuro de la entidad.

La Junta directiva del Náutico ha decidido convocar Asamblea General Extraordinaria de Socios para el próximo día 4 de julio en la que explicará su versión sobre cómo afecta la sentencia del TSJ respecto a la concesión y las acciones a emprender en un futuro inmediato. La directiva del Náutico ha agradecido públicamente la labor del presidente dimitido.