La Generalitat medita proteger un lago surgido de un ataque ambiental

Necesita su tiempo pero la naturaleza, si la dejan actuar por sí misma, es capaz de sorprender y mostrarse en todo su esplendor. Los Clots, un humedal ubicado entre los términos municipales de Benifairó y Simat de la Valldigna son un claro ejemplo.

Se trata de una zona que se creó de forma accidental, más bien por un auténtico ataque ambiental, ya que los agujeros se crearon con la extracción de tierras para la construcción de viviendas, una práctica que actualmente estaría prohibida.

Con el paso del tiempo fue apareciendo el lago, que bebe del manantial de la Fontarda, ubicada a unos metros de ese punto. Los Clots se encuentran en terrenos privados y se accede a ellos desde el camino del Pla que une Tavernes con Simat y Benifairó, a través de campos de naranjos.

Actualmente sus propietarios ya no pueden hacer allí absolutamente nada, según explica el alcalde de Benifairó, Josep Antoni Alberola, debido precisamente a que se trata de un espacio natural.

En invierno, cuando el agua de la Fontarda lo llena por completo solo hay un lago grande que ocupa una extensión de 80.000 metros cuadrados. En verano, cuando baja el nivel puede haber varias pequeñas lagunas.

Con el paso de los años, aquel espacio se ha convertido en una zona con gran valor ambiental. Allí se ha establecido una importante cantidad de ejemplares de fauna autóctona como «garces», «garces reials» o el «martín pescador», llamados «blavets» en valenciano por su espectacular color. También hay anfigios, alguna tortuga y se han visto halcones y búhos.

Además, en el entorno del lago también ha crecido vegetación autóctona. Todo ello lo ha convertido en un espacio muy singular en plena Valldigna.

Temor a que se degrade

Los ayuntamientos, ante el temor a que el espacio acabe degradándose, han pedido ayuda a la Conselleria de Medio Ambiente.

El alcalde de Benifairó, Josep Antoni Alberola, el concejal de Medio Ambiente de esta localidad, Manel Gómez, en representación de los dos ayuntamientos y también de la Mancomunitat de la Valldigna, se reunieron hace unos días con el director general de Medio Natural, Jesús Ramon Gómez y el subdirector general de Espacios Naturales, Juan Jiménez. Estos mostraron su interés en el tema, proponiendo medidas de actuación inmediatas que pasan por la eliminación de la especie invasora de la caña y la plantación especies autóctonas vegetales.

Además, desde los ayuntamientos propusieron a los representantes de la Generalitat la posibilidad de proteger este espacio incluyéndolo en el catálogo de zonas húmedas de la Comunitat Valenciana, logrando la misma catalogación que tiene, por ejemplo, la marjal Pego-Oliva .

Alberola señala que para sus ayuntamientos supone una zona de gran valor ambiental: «Nosotros, de hecho, nos preocupamos mucho de que allí no se produzcan vertidos. No queremos que se degrade y que ya que se ha generado de forma natural que se mantenga, porque se ha formado una zona húmeda de alto valor medioambiental».

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