V. A., Valencia Lo más llamativo de este verano no han sido las tormentas de los últimos días, ni siquiera el temporal marítimo que las acompañó ni las bajas temperaturas, sino las continuas oscilaciones térmicas. Tanto en la Comunitat Valenciana como en el resto de España la situación atmosférica de este año está deparando que pasemos, casi de un día para otro o al cabo de muy pocos días, de una masa de aire cálido a otra más fresca, y los termómetros ya empezaron a dar síntomas en julio, pero este agosto parecen haberse vuelto locos.

En la gráfica de arriba están insertadas las curvas marcadas por las temperaturas máximas de cada día -desde el 1 al 28- en Valencia de los meses de agosto de 2006 y 2007. Amén de que el mes es este año algo más fresco que el pasado, lo más destacable son las rápidas oscilaciones de este año, que se dan en periodos más cortos que en agosto de 2006.

El bajón de finales de la semana pasada y la remontada posterior de estos días son espectaculares y, aunque se han producido otras veces, no son muy habituales en los meses de verano, en los que muchos años suele darse cierta monotonía térmica, especialmente en situaciones cálidas.

En los próximos días las cosas parece que continuarán en esa línea, porque mañana y pasado se inicia un refrescamiento, pero algunos de los primeros días de septiembre se perfilan cálidos en los modelos de predicción a medio plazo.