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Una vez proclamado Ximo Puig como secretario general del PSPV, llegó el turno de las comisiones. Cuatro grupos se reunieron y aprobaron una serie de enmiendas a la ponencia marco del congreso. Las más relevantes llegaron de dos áreas: estatutaria y económica.

Listas cremallera

Uno de los principales acuerdos que se adoptó ayer fue apostar por las listas cremallera. Es decir, potenciar la igualdad de género en las candidaturas, obligando a incluir en ellas hombres y mujeres de manera alterna. De hecho, Ximo Puig reiteró a lo largo de todo el día la necesidad de incorporar a las mujeres a la vida orgánica e institucional del partido.

Un militante, un voto

La comisión también dio luz verde a una enmienda para elegir mediante un sistema de «primarias a la francesa» al próximo candidato socialista a presidir la Generalitat. Es decir, que todos los militantes y grupos de simpatizantes tendrán voto. Además, los afiliados también podrán emitir su sufragio para escoger al secretario general. Hasta ayer, al líder del PSPV lo elegían delegados.

Recuperación de las comarcas

Uno de los puntos que más debate provocó fue la recuperación de la estructura comarcal. Se presentaron varias enmiendas y se acordó su rescate. Eso sí, también se mantendrán las provincias. La comisión valoró también una propuesta para dejar las estructuras provinciales bajo mínimos, pero no fructificó. El tema pasó al plenario. Al cierre de esta edición, todavía no se había finiquitado.

Cambio en la financiación

En la comisión económica, los socialistas aprobaron decenas de enmiendas a la ponencia marco del congreso. Algunas de ellas, de especial calado. Por ejemplo, una referente a la infrafinanciación que ha recibido la Comunitat por parte del Ejecutivo central a lo largo de los últimos años. «Promoveremos una iniciativa en las Corts para crear una comisión que determine la deuda histórica generada por el desigual sistema de financiación aplicado y exigiremos al Gobierno su inmediato reconocimiento y un plan de pagos en cuanto la situación económica lo permita», reza el documento.

Una banca pública valenciana

La pérdida de peso de CAM y Bancaja también ha animado a los socialistas a sacar adelante una propuesta para crear una banca pública valenciana que permita dotar de liquidez a las pymes y los autónomos. En definitiva, «una entidad financiera pública al servicio de los ciudadanos».

Propuestas de ahorro

Para adelgazar el déficit, los socialistas proponen suprimir las diputaciones provinciales —«no logran encajar con exactitud en la nueva realidad autonómica», aseguran—; que la Iglesia «deje de estar exenta del pago del IBI»; y que se elabore una norma común para todo el Estado que explicite que los políticos no pueden cobrar dos sueldos públicos.

Dación en pago

La comisión de Economía también incorporó una enmienda a la ponencia que defiende la dación en pago. «Es una inmoralidad que las familias sigan como deudoras de la banca», esgrimen.