Profesionales sanitarios y pacientes se reunieron ayer en el hospital Sant Joan de Alicante, en la jornada "El SIDA: 32 años después", donde alertaron de la aparición del VIH en edades cada vez más jóvenes, debido a una banalización de la enfermedad por parte de la sociedad. En la inauguración de este acto, organizado por la Unidad de Enfermedades Infecciosas del centro hospitalario, el gerente del Departamento de Salud del hospital Sant Joan, Francisco Soriano, destacó que "esta jornada supone una mirada diferente a la enfermedad al ofrecer el punto de vista de los pacientes".

Soriano señaló que "la sociedad ha banalizado la enfermedad y prueba de ello es que la edad está bajando y, en la actualidad, se producen nuevos casos en gente cada vez más joven, algunos por debajo de los 25 años, que llegan en estadios más avanzados, principalmente porque acuden más tarde a hacerse las pruebas".

Protesta por los recortes

La Coordinadora de Asociaciones de Lucha contra el Sida de la Comunidad Valenciana (Calcsicova) denunció ayer con preservativos gigantes que las 433 nuevas infecciones de VIH en la C. Valenciana en 2012 son el reflejo de "los recortes que se están practicando en materia de prevención contra esta enfermedad con el pretexto de la crisis económica".

La Plaza de la Virgen acogió el acto de protesta previo al día internacional de lucha contra el VIH/Sida, que se conmemorará en la jornada de hoy. Desde Calcsicova alertaron sobre "un profundo retroceso en los derechos de las personas que viven con la enfermedad".

Por otra parte, fuentes de la conselleria de Sanidad destinó el año pasado 82 millones de euros a la dispensación de tratamientos antirretrovirales destinados a las personas con VIH, lo que sitúa a la Comunitat Valenciana en el cuarto puesto en este tipo de gasto, por detrás de Madrid, Cataluña y Andalucía. El sistema atendió a 11.000 personas el año pasado, lo que sitúa el gasto medio por paciente en 7.500 euros. Durante el primer semestre de 2013, el coste farmacéutico por estos tratamientos se ha situado en 41 millones de euros para 9.268 pacientes.