Varios de los empleados de una subcontrata de Terra Mítica que facturó por obras de jardinería y riego han declarado hoy como testigos no haber trabajado nunca en el parque o haber realizado únicamente obras de albañilería, como bancos de ladrillo, a la entrada del mismo.

La Audiencia Provincial de Valencia ha acogido hoy la vigésima segunda sesión de este juicio, en el que constan 35 acusados por un supuesto fraude superior a los 4 millones de euros, cometido mediante la presentación de facturas falsas.

La mayor parte de los testigos que han declarado hoy han sido exempleados de Altos del Carrichal, empresa de uno de los procesados, Antonio Moreno Carpio, para quien la Fiscalía reclama una pena de 53 años y cuatro meses de cárcel, la máxima en esta causa.

Según se cuestiona en este juicio, al parecer varias de sus empresas intercambiaron facturas con otras contratadas en la construcción del parque de Benidorm para justificar pagos por servicios, cuya ejecución real se pone en duda.

En su declaración como acusado, Antonio Moreno, uno de los empresarios que desveló la supuesta trama a diputados del PSPV, explicó que llegó al parque para trabajar con la empresa Excavaciones Escoto y que allí conoció a Vicente Conesa, otro de los principales acusados, adjudicatario de obras de ajardinamiento y riego, que le subcontrató algunas de estas labores.

En la sesión de hoy han comparecido como testigos tres empleados de Altos del Carrichal: dos de ellos han afirmado no haber trabajado nunca en el parque y un tercero ha explicado que trabajó durante una semana construyendo unos pequeños bancos de ladrillo a la entrada del mismo.

Estas obras de la entrada del parque, según el testimonio de los testigos (personal de Nexo Entrecanales y Excavaciones Escoto), se adjudicaron a Nexo Entrecanales pero se subcontrataron a Excavaciones Escoto, quien a su vez contrato a personal de Altos del Carrichal sin que Entrecanales tuviese constancia de ello.

Uno de los entonces responsables de Excavaciones Escoto ha reconocido que siempre que lo necesitaba reclamaba a sus jefes más empleados, que de forma puntual llegaron desde Altos del Carrichal.

Asimismo, ha reconocido que en ocasiones, "cuando apretaba a la gente", cuando les exigía más esfuerzo, hacía constar en los partes horas trabajadas por capataces en lugar de peones, que era lo que realmente eran, para que cobrasen más.

Esto lo hacía sin indicar nombres, de forma que "ellos (los trabajadores) se lo repartían".

Tanto la subcontratación sin autorización previa como el pago a trabajadores por encima de su categoría eran desconocidos para la empresa adjudicataria, Nexo Entrecanales, según el testimonio de uno de sus empleados, quien ha reconocido que en los contratos se hacía constar de forma expresa la prohibición de subcontratar sin autorización.