El próximo Consell tendrá como presidente a Ximo Puig y como vicepresidenta a Mònica Oltra, quien según el primero «ejercerá un papel relevante en el Consell». La líder de Compromís presentó una propuesta de Ejecutivo ante los medios de comunicación y fijó para el número dos del Gobierno valenciano la portavocía, la Conselleria de Presidencia y la de Política Inclusiva e Igualdad, la actual Bienestar Social con el nombre «adaptado a los nuevos tiempos».

El papel de Oltra ha sido fundamental en el desbloqueo de las negociaciones del pacto de Gobierno ya que fue cuando se apartó de la carrera por la presidencia, cuando la situación ha cambiado. El propio Puig agradeció el apoyo de la líder de Compromís y su coalición y se comprometió a que la candidata tenga mucho protagonismo en el Ejecutivo.

Por la tarde los equipos negociadores se reunieron para empezar a pactar las conselleries y realizaron el primer comunicado conjunto. «Deberá ser un gobierno único y compartido, donde primen la transversalidad y el mestizaje que fomenten el trabajo en común», explicaron en el documento, en la línea de lo que habían dicho por la mañana Puig y Oltra en sus diferentes comparecencias.

Asimismo, se acordó que el futuro gobierno deberá ser «austero en sus formas, con una clara reducción de altos cargos y asesores». Los miembros de la negociación también coincidieron en la necesidad de promover un Ejecutivo formado por personas de «acreditada competencia y trayectoria profesional».

Finalmente, tanto PSPV-PSOE como Compromís destacaron la necesidad y obligación de que se trate de un gobierno paritario entre hombres y mujeres.

Con este inicio de las negociaciones arranca la última fase de la confección de un gobierno de progreso, tras estar claro el programa y el presidente. La intención de Puig y de Oltra es que los plazos se acorten lo máximo posible, a poder ser antes del 3 de julio que marca el calendario oficial.