La consellera de Agricultura y Medio Ambiente, Elena Cebrián, anunció ayer la puesta en marcha de iniciativas para lograr un sustancial incremento de la Recogida Selectiva de Residuos que pasa por aumentar la captación diferenciada de los residuos de origen orgánico que actualmente acaban en el conocido como contenedor de «restos» donde el ciudadano deposita toda la basura que no tiene un recipiente específico en las calles (papel-cartón, envases y vidrio).

Según el director general de Cambio Climático y Calidad Ambiental, Joan Piquer, el objetivo es lograr que antes del año 2020 se recicle un 50 % de la totalidad de los residuos generados.

Para lograr este porcentaje resulta «estratégico» implantar la recogida selectiva de materia orgánica, resaltó Piquer. En este objetivo, la conselleria se debate entre el recurso al «quinto» contenedor, identificado con el color marrón en los lugares donde ya se utiliza, o volver a la recogida puerta a puerta, «mucho más eficaz», según el secretario autonómico de Medio Ambiente Julià Álvaro, aunque «injustamente» precedida de una «mala fama», resaltó.

Piquer recordó que ambas modalidades ya se han utilizado con carácter experimental en algunas localidades de la Comunitat Valenciana, pero que ahora deberán estar implantadas «definitivamente» antes de 2012 para cumplir los objetivos de la ley estatal de residuos y las directivas europeas.

«Ni un kilo de compost»

La recogida selectiva de residuos, incluida la fracción orgánica„también conocida ahora como bioresiduos„debería estar implantada desde 2009, según el Plan Integral de Residuos (PIR) actualmente en vigor, aunque solo ahora se están dando los primeros pasos, según Piquer.

El director general recordó que se trataba de una «obligación» y adelantó la posibilidad de establecer «políticas económicas y fiscales» para favorecer la recogida selectiva en la Comunitat Valenciana.

El déficit en la recuperación de la fracción orgánica provoca incongruencias como la de que siendo la Comunitat Valenciana una de las que más residuos de este tipo genera „elevado consumo de fruta y alimentos frescos y potente industria agroalimentaria„ y una de las que más abonos necesita para su agricultura «no se produzca ni un solo kilo de compost», destacó la consellera Elena Cebrián.

La mezcla de residuos que actualmente se produce en el contenedor de «restos», en el que la mayoría de los ciudadanos deposita su basura, impide elaborar un abono orgánico que cumpla con los requisitos de calidad exigibles. El elaborado en algunas plantas de compostaje es «caro» y «malo», explican en la conselleria, lo que provoca que no tengan demanda entre el agricultor.

La consellera realizó estas declaraciones en el marco de un acto informativo sobre «Separación y Recogida Selectiva de los Bioresiduos al que asistieron cerca de 200 alcaldes y concejales de la Comunitat Valenciana y en el que se expusieron algunos de los planes de la Generalitat y las experiencias de éxito realizadas en otras comunidades.

En referencia a los restos agrícolas, forestales y de poda, la directora general de Prevención de Incendios forestales, Delia Álvarez, subrayó que el 78 % de los siniestros de este tipo se produce por un mal uso del fuego, vinculado muchas veces a la eliminación de estos restos.

La conselleria descarta su incineración para generar energía eléctrica y aboga por su uso «térmico» directo para calefacciones o como componente del compost.

Elena Cebrián terminó su intervención afirmando que la separación, recogida y aprovechamiento de los bioresiduos es «una oportunidad para la mejora del medio ambiente y la calidad de vida de las personas en sus municipios».