Averías constantes, ruidos metálicos y el temor a que «cualquier día pase algo» llevaron a los vecinos de un inmueble situado en la calle Blas de Otero de Manises a sustituir la máquina tractora de su ascensor en abril de 2015. Dieciocho meses después, estos temores se materializaban cuando un ascensor similar al suyo y situado en el mismo bloque de viviendas se venía abajo desde un sexto piso hasta el sótano tercero, provocando la rotura de cadera a una mujer de origen chino que bajaba con sus dos hijas en ese momento.
Según explicaron los administradores de la finca, fueron los titulares entonces del mantenimiento, Ascensores Domingo, que a su vez habían actuado como instaladores, quienes advirtieron a los vecinos de que la última rotura sufrida en las primeras semanas de 2015, solo diez años después de la construcción del edificio, podía ser «algo más que una avería», no «garantizaban» la instalación y «aconsejaban» cambiar la máquina.
«Existía cierto consenso sobre la posible ubicación incorrecta del grupo tractor que estaba provocando sobretensiones en todos los equipos», añadieron.
«Contactamos con varias empresas especializadas, incluida alguna OCA (Organismos de Control Autorizado), pero nadie quiso comprometerse por escrito apuntando las razones del posible desgaste. Tanto es así que finalmente pasamos de pensar en una querella judicial como perjudicados, que descartamos porque nadie nos apoyaba, a cambiar la máquina y poner una nueva, pues creímos que era la solución más tranquilizadora para los vecinos», dijeron .
«Probablemente, y a la luz de lo ocurrido en la finca de al lado, reconsideremos ahora la posibilidad de retomar la via judicial», concluyeron.
De los cuatro ascensores instalados en el bloque de Blas de Otero de Manises, uno sigue precintado tras venirse abajo el pasado 18 de septiembre, dos estan inmovilizados «preventivamente» y solo el cuarto, al que se le sustituyó el grupo tractor en 2015, sigue en funcionamiento.
Inspección
Por otra parte, ayer se produjo una nueva inspección del ascensor accidentado en presencia del responsable de mantenimiento, Ascensores Fain, el abogado de la comunidad de vecinos y técnicos de la conselleria de Industria.
El representante legal de los afectados mostró el «disgusto» de los vecinos ante la negativa de los técnicos de Industria a levantar un acta en el lugar e incluir en ella la existencia de «guías dobladas o pastillas de deslizamiento desgastadas de forma irregular », añadió.
Según el abogado, existió «mucho compadreo con la empresa de mantenimiento», lo que llegó a irritar a los representantes de los vecinos del inmueble.
