Los fallos judiciales han disparado y continúan ampliando el número de licencias de chófer profesional muy por encima del ratio de una VTC por cada 30 taxis legalmente establecido desde noviembre de 2015. Hace unas semanas la Conselleria de Transporte reconocía que en estos momentos la Comunitat tiene 450 licencias de transporte con conductor, de las cuales 216 ya están otorgadas y 234 están pendientes, bien porque están pendientes de entrega de la documentación requerida, bien por estar pendientes de ejecución de sentencia, como es el caso de las 200 de Ares Capital.

Lo más preocupante para el sector del taxi es que hay más de 2.150 peticiones rechazadas pendientes de la justicia en la Comunitat Valenciana, frente a 4.400 taxis. De continuar los pronunciamientos judiciales pendientes por la senda de los dos últimos, en pocos meses cientos de estos conductores pueden estar en las calles de València compitiendo con el servicio tradicional a través de las nuevas plataformas tecnológicas o en empresas privadas de alquiler de coches con conductor.

Las licencias pendientes de sentencia fueron denegadas por la Generalitat por la interpretación que esta hace de la legislación en la materia, que es estatal.

En este momento la legislación no permite otorgar mas licencias que superen el ratio de 1 VTC por cada 30 taxis, o sea que el número máximo de VTC que permite la legislación estatal para la C. Valenciana sería de 147 licencias de VTC, muy superior a las 216 ya otorgadas. «Por tanto, cualquier nueva petición habrá de ser denegada por superar el ratio», señalaron desde la conselleria.

Por último, cabe destacar que la situación que se vive en la Comunitat Valenciana no es extraordinaria. En Madrid, la justicia lleva años reconociendo licencias denegadas por la administración. Allí el mercado de este tipo de vehículos es mucho más amplio, tanto como para haber permitido la entrada en funcionamiento de Uber, que opera con estas licencias.