En esta crisis, resuelta al fin, todos han ganado, pero unos más que otros. El IV Marqués del Túria, Tomás Trenor, se perfila como futuro presidente tras haberse convertido durante esta crisis en el hombre fuerte del director Manuel Llombart en el patronato de la Fundación, al que no pertenece el exconseller pero sobre el que tiene una influencia notable.

Frente a la voluntad del presidente, Antonio Llombart, de firmar con la conselleria hace semanas, Manuel Llombart se granjeó el apoyo del patronato para presionar hasta el final. Han conseguido lo que pretendían pero a costa de un gran desgaste interno, con la dimisión de dos patronos (Javier Garín y Concepción Sánchez) y una considerable alarma social.

En ese contexto, Tomás Trenor, presidente de la Asociación contra el Cáncer y vicepresidente de la Fundación, capitaneó la rama más enrocada del IVO. Fue él quien se vio con Ximo Puig el jueves, el que mantuvo el encuentro con Carmen Montón el viernes, y el que acudió al Palau ayer con Manuel Llombart y el también patrono Vicente Fontestad para la reunión definitiva. Dado que Antonio Llombart, presidente y tío del director general, estaba por el sí al contrato, ha sido Trenor el negociador oficial para vencer las resistencias. Antonio, de hecho, no fue convocado a la cumbre definitiva del domingo en la calle Caballeros.

Según fuentes del IVO, Trenor se perfila como sucesor de Antonio Llombart, de 82 años. «Ha sido al Marqués del Túria a quien ha seguido el resto de patronos», añaden. La apertura de la nueva etapa, con Manuel Llombart reincorporado a la dirección y la futura elección de nuevos patronos llevará aparejado un cambio en la presidencia, según dan por hecho desde el entorno del IVO.