A dos semanas de la primera huelga general en la enseñanza pública contra el Consell del Botànic, convocada en solitario por el mayoritario Sindicat de Treballadors de l'Ensenyament (Stepv), la Conselleria de Educación ha anunciado una batería de medidas para mejorar las condiciones laborales del profesorado.

El impacto de las mejoras desgranadas por el conseller Vicent Marzà y el secretario autonómico Miquel Soler se traducirá en la contratación de 1.200 interinos más para el próximo curso, lo que elevará por encima de los 55.300 docentes la plantilla de la enseñanza pública .

Esto supone que el próximo septiembre la enseñanza pública valenciana tendrá el mayor número de profesores de la historia, superando en casi un millar el máximo que se alcanzó en el curso 2009-10. Los recortes en la educación aplicados a partir de entonces por el Consell del PP redujeron el claustro de colegios e institutos en más de 4.000 personas. En los cuatro cursos que ha planificado el tándem Compromís-PSPV no solo se ha revertido el «tijeretazo» a la plantilla sino que «superamos la situación previa a los recortes a pesar de la infrafinaciación», subraya Marzà.

La ampliación del número de profesores llegará por dos vías: la recuperación progresiva del maestro tutor generalista en Primaria y la también redución paulatina de una de las 20 horas semanales de la carga lectiva del profesorado de Secundaria para destinarla a tareas de coordinación y trabajo en equipo.

El PP, para adelgazar las plantillas de Primaria de los colegios de más de una línea, eliminó la obligatoriedad de que el tutor de aula fuera un maestro generalista. Al convertir en tutores a los maestros especialistas (Inglés, Educación Física, Música y Pedagogía Terapéutica), podía minorar las plantillas aunque esta pérdida suponía reducir el número de desdobles de aulas en dos grupos en asignaturas troncales para reducir el fracaso escolar. Según Marzà, «en septiembre de 2018, en torno al 50 % de los colegios tendrán tutor generalista en todos los grupos de Primaria».

El Gobierno mantiene el Real decreto 14/2012, de recortes en educación, que incrementa la carga del profesorado de Secundaria de 18 a 20 horas dentro de su jornada laboral semanal, que es de 37 horas y media. Treinta de ellas de presencia en el centro (20 horas directa de clase y las 10 restantes de reuniones de coordinación, tutorias, guardias...) y las 7 horas y media restantes de trabajo en casa (preparar y corregir exámenes...).

Por tanto, la conselleria no puede rebajar la jornada laboral del profesorado. Lo que quiere hacer es reducir en una hora semanal la docencia en beneficio de las tareas de coordinación y trabajo en equipo. Esta mejora se aplicará el próximo curso al profesorado tutor de ESO, al que imparte ámbitos en la FP Básica, en el Programa de mejora del aprendizaje y del rendimiento (PMAR) y en el Programa de refuerzo de 4.º de ESO, y al profesorado de los talleres de refuerzo, los talleres de profundización y los proyectos interdisciplinares del nuevo decreto del currículo.

Preguntado por si tras estas medidas ve justificada la huelga del Stepv, Marzà respondió: «Dificilmente podrán encontrar un Consell que le dé más valor y esté más al lado de la educación pública que éste, lo único que nos frena es la infrafinanciación. Mejoramos las condiciones laborales del profesorado tan rápido como podemos».