La Inspección de Trabajo ha dado cuatro meses a la Conselleria de Sanidad de los centros de salud cuando tienen que salir a una urgencia. Si no lo hacen, actuarán de oficio para que se cumpla la normativa. Así se expuso en la comisión de seguridad y salud laboral que ayer celebraron representantes de la administración sanitaria, de la Dirección General de Inspección de Trabajo y de los sindicatos.
De esta forma, la Conselleria de Sanidad tiene de tiempo hasta mediados de septiembre para llegar a un acuerdo «satisfactorio» con los sindicatos que resuelva el problema denunciado por Cemsatse ante la Inspección de Trabajo: tanto los médicos como las enfermeras de los centros de salud tienen que recurrir a sus vehículos cuando tienen que ir a atender a un enfermo en su casa. La Conselleria de Sanidad asegura que se resolverá «sin problemas» y además, «en breve».
«No solo se incumple la ley de prevención de riesgos laborales porque asumimos los gastos del transporte nosotros sino también mucha otra normativa desde el manejo de cargas, de transporte de mercancías peligrosas o incluso de Tráfico», apunta Francisco Martínez, delegado de prevención de riesgos laborales del sindicato Satse. Además de los incumplimientos, los profesionales entienden que la calidad del servicio «merma» ya que al desplazarse en un vehículo que no es oficial «nos obliga, a cumplir con todas las normas de tráfico o a aparcar debidamente, cuestiones que un vehículo oficial tiene más fácil y hablamos de visitas a domicilio pero también de urgencias en las que hay que llegar cuanto antes».
Hasta el año pasado, el contrato vigente de transporte sanitario ofrecía cobertura para hacer estas salidas en ambulancia cuando los centros estaban funcionando en horario de urgencias ya que, por las mañanas, los médicos y enfermeras ya utilizaban habitualmente sus propios coches. El nuevo contrato de ambulancias que ha entrado en vigor este año, sin embargo, quitaba también este servicio para las tardes y noches lo que llevó al sindicato Cemsatse a presentar tres denuncias ante la Inspección de Trabajo en cada una de las provincias.
Según Martínez, pese a lo dispuesto en el contrato de ambulancias, no se ha retirado del todo el servicio de ambulancias para las urgencias en lo que va de año. Ahora, sin embargo, los sindicatos aspiran a que se dé una solución global tanto para las salidas a domicilio desde los centros de salud en horario normal como durante las tardes o noches. «No pedimos una ambulancia para todo porque las salidas no tienen todas la misma urgencia. Una solución sería disponer de ambulancias pero también de vehículos a disposición del personal o con conductor pero que están identificados y que cumplan con la normativa de transporte de residuos, por ejemplo», añadió.
