Guerra al azúcar refinado, pero también al azúcar moreno, la panela, la miel, el jarabe de ágave o los edulcorantes artificiales. Para el presidente de la Sociedad Valenciana de Endocrinología, Diabetes y Nutrición, Carlos Morillas, no hay opción «buena» para endulzar los alimentos. «La opción, sea cual sea el endulzante, es reducirlo a lo mínimo posible porque ninguna de las alternativas es del todo saludable y, sobre todo, evitar que los niños se acostumbren a los alimentos dulces», apunta el especialista que no cree que la guerra abierta contra el azúcar sea otra «moda». «El sabor de los alimentos llega a través de la grasa y del azúcar. Hasta ahora ha habido más trabajos sobre los efectos de las grasas en la salud pero ahora empieza a haberlos del azúcar y no solo observacionales y todas las conclusiones llegan a lo mismo, como la relación entre las bebidas azucaradas y el cáncer de mama, su consumo repercute y mucho en la salud».