César Sánchez, presidente de la Diputación de Alicante y número uno del PP al Congreso en las elecciones del 28-A, va a intentar compaginar su escaño en Madrid con un segundo mandato en la corporación provincial.

Era una decisión, contra la opinión de la dirección regional del PP, tomada desde que Pablo Casado recurrió al único dirigente del partido en la Comunitat Valenciana que tiene sillón en su ejecutiva para encabezar la candidatura de las generales.

Sólo le faltaba a César Sánchez, avalado por Génova, encontrar un espacio desde el que materializar su candidatura municipal. Descartada la lista local de Calp, su población y de la que ahora es alcalde, y en los últimos días aparcada también la posibilidad de que encontrara acomodo en la papeleta municipal de Alicante, como se había barajado y como fue norma durante mucho tiempo para los aspirantes del PP a la Diputación, César Sánchez se presentará al final como concejal en Llíber, una pequeña localidad de poco más de mil habitantes ubicada en la Marina Alta. Intentará así de nuevo el asalto a la corporación provincial desde su comarca.

Hace tiempo que César Sánchez había anunciado que no volvería a optar a la Alcaldía de Calp. Pero sí que mantenía su voluntad de intentar un segundo mandato en la Diputación. Su candidatura al Congreso de los Diputados no le apartó de ese objetivo a pesar de que los estatutos del PP sólo prevén duplicar escaño en Madrid y la presidencia de una institución provincial en casos excepcionales con el visto bueno de Génova.

Y este lo es. ¿Por qué? Supone la certificación por parte de la nueva cúpula nacional del PP de que, en estos momentos, César Sánchez es la referencia política de Casado no sólo en Alicante sino en la Comunitat Valenciana. Desde un primer momento, César Sánchez había descartado presentarse en Calp. No iba a repetir de alcalde y haber formado parte sólo de la lista hubiera dado una sensación de «tutela» sobre el nuevo equipo que el todavía primer edil no estaba dispuesto a dar.

Entonces se planteó la posibilidad de formar parte de la lista municipal de Alicante. Tradicionalmente, el candidato del PP a la Diputación ocupaba el segundo puesto de la candidatura de la capital, una norma no escrita que se rompió en el mandato de Luisa Pastor y en 2015 cuando el inicial aspirante al Palacio Provincial, José Císcar, fue el tres en la oferta de la ciudad de Alicante. Luego, como se recordará y tras la presión de Ciudadanos, Císcar renunció en favor de César Sánchez.