El expresidente de la Generalitat Francisco Camps acaba de llegar a la Ciudad de la Justicia para declarar por las irregularidades en la visita del papa. Y asegura que afrontaba esta nueva declaración judicial "muy enfadado con la pareja del frenesí, porque no es justo ni serio que el hombre del flequillo cambiante y la mujer de las camisetas, el señor Puig y la señora Oltra utilicen la abogacía de la Generalitat contra quienes fuimos presidentes del gobierno valenciano. Es un escándalo de primera magnitud", ha declarado ante los numerosos periodistas que lo esperaban a las puertas del edificio judicial.

Camps ha criticado duramente la decisión de la Abogacía de la Generalitat de acusarlo en la causa que investiga las presuntas irregularidades en la construcción del circuito de Fórmula 1, en contra del criterio dela Fiscalía Anticorrupción que ha solicitado el archivo de la causa. "En mi época la Abogacía era independiente y ahora depende de un director general que depende directamente del señor Puig. Es una vergüenza y un escándalo y un escarnio para todos los valencianos que la parejita este utilizando a toda la Generalitat".

"La Fiscalia Anticorrupción basa su escrito no sólo en cuestiones que tiene que ver con la propia visión jurídica del fiscal anticorrupción sino con el informe del interventor de la Generalitat, pedido por el abgoado de la Generalitat, que dice que no hay perjuicio para las arcas publicas. Y, cuando ven que se les acaba el tiempo, como los malos perdedores, buscan un tiempo mas de descuento, para seguir manteniéndome en las circunstancias en las que me he visto estos últimos años".

Camps ha insistido en que "el interventor ha dicho que no hay irregularidad ni en los contratos ni hay quebranto para las arcas publicas de la administración autonómica. Es decir, el abogado de la Generalitat, Ximo Puig, va contra su propia interventor, contra la propia Generalitat. Y el abogado acusa a los políticos, altos cargos y compañeros suyos de la administración que también están en este proceso desgraciadamente involucrados".

Por último ha asegurado que "esto es una persecución política del hombre del flequillo cambiante y la señora de las camisetas que utiliza al abogado de la Generalitat, Jorge Herrero, que creo quiere trabajar en algún bufete de estos importantes y sacar algún rédito profesional, para seguir persiguiéndome a mi". Por ello Camps defiende que "ante la costumbre de Puig de recurrir mis absoluciones y mis archivos, debe pedir perdón a los valencianos por usar a un órgano independiente para su propia acción política".