«Empezaron hace 40 años en un garaje de la Politècnica y hoy son un centro de referencia mundial en motores térmicos, líderes nacionales en captación de fondos para Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) y conjuga a la perfección la investigación básica con la transferencia tecnológica a empresas nacionales e internacionales». Con estas palabras abría ayer el rector de la Universitat Politècnica de València (UPV), Francisco Mora, la conmemoración del 40 aniversario del Instituto CMT de Motores Térmicos del campus de Vera.

Renault, PSA Peugeot Citröen, Nissan, Jaguar Land Rover, General Motors o Ford son algunos de sus principales clientes de este centro investigador fundado por el profesor Francisco Pairi, quien se jubiló hace dos años y ayer recibió una larga y sentida ovación.

Homenaje al profesor Pairi

El centro factura alrededor de cinco millones de euros anuales a través de su actividad investigadora, que lleva a cabo en unas instalaciones que ocupan más de 9.000 m2 y prepara la apertura de un nuevo laboratorio. De los tres investigadores iniciales, el profesor Pairi y dos de sus doctorandos, entre ellos el actual director del instituto, José María Desantes, se ha pasado a un equipo de 160 personas integrado por investigadores, investigadores en formación, técnicos y personal de administración y servicios.

En los últimos 25 años el Instituto de Motores Térmicos ha captado 100 millones de euros para investigación, «un tercio de esta cantidad procede de proyectos competitivos españoles y europeos, mientras los dos restantes son contratos de I+D con empresas», explica desantes. A esta cantidad el director del CMT, añade otros 40 millones de euros de ingresos generados por la tecnología transferida.

Aunque admite que el mundo de la automoción «va a cambiar de una manera importante» en los próximos años, Desantes no ve en el horizonte una fecha de caducidad al motor de combustión. «El futuro va a ser mucho más rico en plantas propulsoras», dice en referencia a la diversidad de motores de todo tipo que se avecina y que estarán relación con el uso principal del vehículo: interurbano o trayectos cortos dentro de una ciudad.

El instituto sigue profundizando en la investigación que le ha dado fama mundial, la de desarrollar motores de combustión más eficientes y con menos emisiones de todo tipo, no solo de CO2, y ha abierto nuevas líneas con un claro potencial como la de hibridación o «la mejora del encaje de motores térmicos con eléctricos, enchufables o no», detalla. Otra vía abierta al futuro es el desarrollo de tecnología destinada a «reducir los problemas de sobrecalentamiento de los motores eléctricos por las baterías de carga y descarga rápida».