La portavoz del Gobierno valenciano, Mónica Oltra, volvió a proncunciarse este viernes en la ruda de prensa posterior al pleno del Consell, celebrado en Burriana, sobre la situación de las playas del litoral valenciano, tras el cierre por presencia de bacterias fecales de nueve playas en apenas 20 días en València, Alboraia, El Puig, Massamagrell y la Pobla de Farnals. Esta última, reabrió ayer, tras dar negativo los analisis por Enterococos, por lo que todas las playas están de nuevo abiertas al baño. Así lo apuntó ayer Oltra, quien lanzó un mensaje tranquilizador y dijo que los ciudadanos pueden acudir «con tranquilidad» a bañarse porque si se han abierto es «porque no hay bacterias».

Oltra apuntó que la Conselleria de Agricultura y Emergencia Climática ha constituido una comisión de carácter permanente que ayer se reunió por primera vez «para estudiar la situación con profundidad» y empezar a aplicar las medidas del plan de acción acordado el jueves en la reunión que mantuvo la secretaria autonómica de Emergencia Climática, Paula Tuzón, con los responsables de la Confederación Hidrógráfica del Júca y los ayuntamientos afectados, entre ellos, los de València, Alboraia y Massamagrell.

En la comisión, que se volverá a reunir el próximo jueves, se acordó la utilización de buzos especializdos para inspeccionar y detectar posibles fugas en el el emisario submarino de Vera, que vierte aguas residuales y pluviales de València y Alboraia con un pretratamiento mar adentro. Aunque la concejalía del Ciclo del Agua de València daba por descartada esta posibilidad, dado que el emisario fue objeto de una reparación el año pasado, la conducción volverá revisarse.

«Vamos a ir descartando hipótesis», apuntaron ayer fuentes de la conselleria, cuyos técnicos también rastrearán los posibles puntos negros de vertido de las acequias de l'Horta Nord.

En función del diagnóstico, la conselleria sopesa la posibilidad de contratar una consultoría para analizar la situación que ha puesto en entredicho la calidad de las aguas de las playas valencianas, tres de ellas (Cabanyal, Devesa y Malva-rosa con bandera azul).

Oltra, que la semana pasada dio por plausible como causa de la contaminación por fecales de la Devesa, la sobrecarga de la depuradora de Pinedo, apuntó ayer que está «prácticamente descartado» que la contaminación se deba a vertidos de las depuradoras que jalonan el litoral valenciano, algunas conectadas con emisarios y otras que vierten a barrancos como el del Carraixet.

«Las concentraciones de bacterias son bajas, pero cuando se encuentra se actúa», destacó Oltra. «La Comunitat Valenciana encabeza en Europa la depuración de aguas y el agua tratada». Al año se realizan 4.000 muestreos en 250 puntos de muestra de 219 playas.

La directiva europea obliga a hacer un muestreo quincenal, y la Conselleria «hace uno semanal, el doble de lo que se exige», destacó la vicepresidenta.