? Las tormentas mantuvieron el viernes en vilo a los bomberos de Castelló, que tuvieron que intervenir para evitar males mayores. Según datos de la Aemet, más de 1.300 rayos cayeron sobre la provincia, causando al menos siete pequeños incendios que no fueron a más por la rápida actuación de los bomberos. El más importante tuvo lugar en Vilanova d'Alcolea, donde ardieron 200 metros cuadrados de matorral. También en Segorbe resultaron afectados otros 50 metros, en Castell de Cabres 20, y en El Toro-Barracas, apenas dos. Todos estos fuegos fueron controlados y extinguidos rápidamente por los efectivos desplazados. También hubo unos pequeños conatos de incendio en los términos municipales de la Serra d'en Galceran, Morella y Cirat.