La asociación CIEs NO ha denunciado ante la Delegación del Gobierno a la Policía Nacional por «impedir» la manifestación habitual a la puerta del Centro de Internamiento para Extranjeros (CIE) de Zapadores en el que se concentran de forma semanal cada martes «desde hace más de nueve años», lo que, a su juicio, constituye una «vulneración del derecho fundamental», según el escrito presentado ayer.

El colectivo recuerda que en estos nueve años «jamás» ha habido incidentes ni problemas, mientras que en la concentración del martes, que, como todas las anteriores, estaba formalmente autorizada por la Delegación del Gobierno, un responsable policial propició que los agentes bajo su mando «arrinconaran» a los manifestantes e identificaran a varios de ellos «sin más motivación que la de que estas personas hubiesen pedido una explicación a por qué no se cumplía con lo que recogía la autorización, de permitir que la concentración se desarrollase ante la puerta azul» que comunica la calle del Doctor Waksman con la entrada al CIE, según explicó una fuente de València Acoge. Esta ONG, que trabaja habitualmente con personas migrantes y con internos del CIE, recordó que la concentración del martes, en la que también participaba la organización Casa Marruecos, tenía por objetivo homenajear al joven marroquí de 25 años Marouane Abouobaida y denunciar su reciente muerte cuando estaba detenido en estas instalaciones, por lo que «estar frente a la puerta y depositar allí los ramos de flores que llevábamos tenía más sentido que nunca».

Sin embargo, «sin motivo alguno y por sorpresa», los agentes impidieron «el libre derecho de manifestación y concentración, y arrinconó a los manifestantes contra el muro» del CIE valenciano. Pese a que en diferentes ocasiones y por parte de varios participantes ­-el secretario au, Alberto Ibáñez, o la concejala de València Isabel Lozano- se trató de solucionar el problema contactando con la Delegación del Gobierno, no hubo éxito y los policías mantuvieron un «talante agresivo y carente de espíritu de conciliación», «poniendo en riesgo la pacífica concentración».