Los cuatro grandes bloques políticos que conforman el Parlamento europeo sumaron fuerzas ayer para tumbar los recortes planteados por la Comisión Europea en el Marco Financiero Plurianual (MFP) 2021-2027. El tijeretazo presupuestario suponía una amenaza para los intereses valencianos, puesto que, entre otras partidas, plantea una reducción del 15 % en el ámbito de la política agraria y del 7 % en los fondos de cohesión. Sin embargo, la alianza de populares, socialdemócratas, liberales y verdes ha vuelto a despejar la pelota al tejado de la Comisión, en un contexto de falta de entendimiento entre las instituciones europeas en el que se han desplomado las previsiones de ingresos para los próximos años a raíz del Brexit, la guerra de los países del Norte que quieren reducir sus aportaciones a la UE y la temida nueva política arancelaria de EE UU.
La resolución a la que ayer dio luz verde por mayoría la Eurocámara -solo se desmarcó la ultraderecha de Identidad Nacional y el Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea, donde está Podemos- reafirma la posición que el parlamento ya explicitó en noviembre de 2018. Además de no aceptar la reducción del gasto, el acuerdo reitera que el Marco Financiero Plurianual debe fijarse en 1,324 billones de euros, una cifra equivalente al 1,3 % de la renta nacional bruta de la UE-27. La propuesta aprobada hace casi un año, además, mantiene la financiación de la Política Agraria Común (PAC) en el nivel de los últimos 7 años y triplica el presupuesto del programa Erasmus, sobre el que también se posa la sombra de los recortes. La resolución del Parlamento europeo hace hincapié en la necesidad de impulsar «un nuevo salto de calidad hacia la transición climática» para combatir el calentamiento global. También aboga por las inversiones en infraestructuras, juventud o digitalización. La Eurocámara se muestra dispuesta a congelar la aprobación del MFP hasta que se alcance un acuerdo negociado satisfactorio, al tiempo que culpa al Consejo del bloqueo y plantea un fondo de contingencia para garantizar la financiación europea.
