Ni presionó a los trabajadores de Imelsa -ahora Divalterra- ni era jefe de Gabinete de la Diputación de València en el momento en el que se aprobaron siete contratos de alta dirección para la empresa pública. El periodista Ricard Gallego, jefe de Gabinete del alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, declaró ayer en el juzgado que investiga el caso Alquería y aseguró que no presionó a los funcionarios para que avalaran la legalidad de los contratos bajo sospecha.

Según apuntaron fuentes conocedoras de su declaración, Gallego, quien solicitó comparecer voluntariamente ante el magistrado-instructor, explicó que asumió el cargo de jefe de Gabinete a partir del mes de febrero de 2016 y que en el consejo de dirección previo al de Divalterra, compuesto por políticos, únicamente se abordaban las posiciones que mantendrían los partidos que integraban el gobierno de la diputación.

En este sentido, Gallego aclaró que nunca tuvo ninguna responsabilidad en Divalterra y que el consejo político en ningún momento sustituyó al de administración. «Debido a mi formación y a que en la diputación se carecía de director de comunicación y de jefe de protocolo, el presidente me pidió que dedicara la mayor parte de mi tiempo a coordinar la acción comunicativa, recibir alcaldes y de protocolo de Presidencia», añadió Gallego.

Además, «me encargaba de asistir al presidente cuando estábamos en València, ya que muchos días estábamos en Ontinyent, de acompañarlo en sus viajes por el territorio y coordinar su agenda». Tras declarar en el juzgado, preguntado por si considera si se hizo una buena gestión en Divalterra, dijo que «sí», que fue «muy buena». «En el caso de los altos cargos falta por ver si estaban bien o mal contratados. Es cierto que ni nosotros ni nadie de Presidencia sabía nada o no podíamos intuir si esos cargos tenían algún tipo de irregularidad en su contratación porque nadie nos advirtió», apostilló en declaraciones recogidas por Europa Press.

«Nosotros solo podemos decir que el que tenía que haber advertido de esto no lo hizo», lamentó.