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Más de 20.000 empresas valencianas están en riesgo por su salud financiera

El 13,6 % de las mercantiles tiene una deuda excesiva, baja rentabilidad y elevados costes

Una ciudadana, frente a un comercio cerrado, en València esta semana. JM LÓPEZ

La pandemia del coronavirus ha infectado prácticamente a la totalidad del tejido empresarial valenciano, pero no todas las mercantiles afrontan la crisis con idéntica fortaleza. Aquellas que tengan una deuda excesiva, una baja rentabilidad y unos elevados costes financieros se hallan ante un elevado riesgo de entrar en la UCI y no salir vivas de ella. Su salud financiera es, simplemente, «débil».

Pues bien, un 13,6 de las empresas de la Comunitat Valenciana se encuentra en esa situación, según un informe publicado ayer por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) elaborado por su director adjunto, Joaquín Maudos, y Consuelo Mínguez. Si tomamos en consideración los datos de la Generalitat sobre empresas inscritas a la Seguridad Social en diciembre de 2019 -un total de 149.745- las compañías en riesgo ascienden a 20.365. El citado porcentaje es ligeramente inferior al de la media española, que está en el 14,6 %. El estudio asegura que la salud financiera de las firmas valencianas «ha mejorado mucho tras la salida de la crisis en 2013», tanto que, «partiendo en 2008 de porcentajes de empresas en riesgo por encima de la media, en 2017 estábamos por debajo».

Aún así, 20.000 son muchas. Los autores del informe explican que el desplome de la demanda tras el estado de alarma que ha paralizado el país «se traduce en una caída de ingresos con el consiguiente problema de liquidez», es decir, «un corte en los flujos de caja que impiden el normal funcionamiento de las empresas», porque «se resiente el pago a proveedores, trabajadores, administraciones públicas, etc.».

Si las dificultades de liquidez se prolongan en el tiempo «pueden transformarse en problemas de solvencia, más pronto y más graves si la capacidad de resistencia de las empresas es limitada». Esa capacidad «es menor cuanto peor sea su posición de partida en términos de rentabilidad, endeudamiento y carga financiera». En este punto, el IVIE recuerda las medidas que ha puesto en marcha el Gobierno para paliar los problemas de liquidez de las mercantiles, pero advierte de que «el programa está diseñado para empresas viables, es decir que hayan demostrado que no tenían problemas de solvencia antes del impacto del coronavirus». Acto seguido, detalla que si las entidades financieras ven que una mercantil está endeudada y tiene baja rentabilidad «obviamente, van a ser reticentes a ofrecerles financiación».

No todas las sociedades llegan a esa tesitura con la misma salud. De hecho, el 15,5 % de las microempresas están en una situación de riesgo, un punto menos que las del resto del país, mientras que entre las grandes ese porcentaje se queda en el 7 %, frente al 10,5 % de sus homólogas españolas.

Deuda y empleo

En cuanto al porcentaje de deuda en riesgo, la diferencia en este caso es «abultada» según el tamaño. Mientras en las microempresas el porcentaje es del 39 %, en las grandes cae a más de la mitad, en concreto un 16,6 %. En su conjunto, ese dato en la Comunitat Valenciana se queda en el 27,6 %, 1,6 puntos menos que en la media nacional.

Por último, el informe del IVIE se detiene a analizar el número de empleados que se encuentran afectados por desempeñar su labor en estas mercantiles con una delicada situación financiera. Se trata de un 6,3 % en la autonomía, por un 8,5 % en España. De nuevo, las peores cifras corresponden a las microempresas, con un 11,7 %, mientras que las grandes compañías valencianas acaparan solo el 4 % del empleo.

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