Desde hace varias jornadas, los datos de contagios en España no paran de subir. La preocupación está en ascenso y este jueves, en su comparecencia habitual, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ya dejaba el primer gran mensaje. «Que nadie se confunda, las cosas no van bien. Es momento de parar. El que detectemos mucho no quiere decir que no haya transmisión, y cada día tenemos más», señalaba el epidemiólogo ante los medios. La inquietud no es para menos. Ayer, Sanidad notificaba otros 7.030 casos de coronavirus, de los que 3.349 fueron diagnosticados en las últimas 24 horas, mientras que ya son 122 los muertos en la última semana, datos muchos más elevados que los que se registraban hace tan solo unos días.

Y de nuevo Madrid siguió a la cabeza de las infecciones detectadas en las últimas 24 horas, con 1.020, lo que supuso casi un tercio del total, seguida del País Vasco con 547, Aragón con 352 y Andalucía con 302, según un último balance sanitario que elevó a 28.813 los fallecidos desde el inicio de la pandemia, 16 más que la cifra global notificada ayer. El aumento de fallecidos, explicó Simón, se debe al retraso de notificación de Aragón.

El epidemiólogo admitió, además, que las características de los casos son diferentes, ya que la edad media de los afectados ha bajado a los 35 años y porque no hay sobrecarga en el sistema hospitalario, pero insistió en que, «a medida que aumente la transmisión comunitaria», subirá el número de ingresos. En este sentido, instó a todos los personajes con «alguna posibilidad de influir en la población» que le ayuden a concienciar a la gente de lo que hay que hacer.

En lo que a él respecta, quiso dejar claro también que «hay maneras de pasarlo bien sin poner en riesgo a nadie. Hay alternativas, seguro», como probablemente habrá «gente especialista en conseguir que la gente se lo pase bien sin poner en riesgo a nadie». Y es que hasta el momento hay un total de 1.126 brotes activos, pero en estos momentos lo que interesa analizar a Sanidad es saber cómo evolucionan estos focos, que se centran sobre todo en el ámbito social, tanto en reuniones familiares como asociados al ocio. Pero también están subiendo en los centros sociosanitarios: el 7 % del total se ha originado ahí. «Que no se confunda nadie, esto no podemos dejar que siga, y ahora tenemos que ser muy conscientes de lo que tenemos que hacer», insistió el experto.

Limitar contactos

En esta línea ascendente de contagios, las autonomías siguen tomando medidas. Ayer, la Junta de Castilla y León decidía reducir los aforos al cincuenta por ciento -estaban al 75 %- en toda la Comunidad para intentar frenar -reduciendo los encuentros de ocio y familiares- la expansión del coronavirus, en una orden que tendrá efecto desde las 00:00 horas de mañana 22 de agosto y que se mantendrá mientras dure la situación de crisis sanitaria, una medida que irá acompañada de refuerzos en el uso de la mascarilla al ser, junto con el cumplimiento de la distancia interpersonal y las medidas de higiene, el medio «más eficaz y sencillo para luchar contra la pandemia». En este sentido, por ejemplo, en las piscinas pasa a ser obligatorio «en todo momento» el uso de la mascarilla salvo durante el baño.

Por otro lado, en Baleares, la presidenta del Govern, Francina Armengol, pedía a la ciudadanía «prudencia y responsabilidad» ante el incremento de contagios y «para no tener que volver atrás» y subrayaba especialmente la necesidad de limitar los encuentros sociales y familiares para reducir el riesgo. En esta línea de preocupación, horas antes, su portavoz del Comité Autonómico de Gestión de Enfermedades Infecciosas, Javier Arranz, aseguraba que Salud no tiene como opción «en este momento» decretar un nuevo confinamiento general.

Más confinamientos y PCR

Esta situación de aislamiento es la que se vive desde ayer en Villamalea (Albacete) y la que no se alargará más en Aranda de Duero (Burgos), pero que en Extremadura tiene nuevos focos. Mientras el Gobierno autonómico afirmaba ayer que levantara la fase dos en la localidad pacense de La Morera, dada su «buena evolución» y volverá a la normalidad a partir de la próxima semana, también aseguraba su demanda a la justicia para que Alcántara (Cáceres) retroceda a la fase dos, con aislamiento social para el control en las entradas y salidas del municipio y Villarta de los Montes (Badajoz) mantenga activa estas mismas medidas.

Por otra parte, en Madrid, este jueves continuaron los cribajes en los barrios de la capital, en concreto en Vallecas, una situación que se repitió en Cataluña en los municipios de Albesa, Balaguer, La Seu d'Urgell, Granollers, Les Franqueses y Canovelles. Hoy, además, se añaden tres barrios de Reus y los barrios de Collblanc y La Torrassa de L'Hospitalet de Llobregat.